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El Atlético alcanza la final de Copa diez años después

A pesar de la derrota (3-2) se hace con el global y accede a la última ronda tras una década en blanco. Valera, en propia puerta al minuto y medio, mantuvo vivo el sueño racinguista, que se desvaneció a los siete con la igualada rojiblanca. El Atlético dominó y se puso por delante nada más comenzar el segundo tiempo; en los dos últimos minutos, y gracias a la concesión atlética, Xisco y Tchité dieron la vuelta. 

Carlos Hierro

Fue la ronda más sencilla para el Atleti en su camino hacia la final de Copa. Un partido de vuelta descafeinado por el resultado de la ida, y una clasificación translúcida que no parece reflejar el estallido de sentimientos de todos los atléticos repartidos por el mundo.

Por fin, y ya eran diez años, el Atlético vuelve a una final; casualmente en una competición que, históricamente, ha sido afín y generosa con los colchoneros.

En un partido así, se perdonan las derrotas, aunque la de hoy haya sido tan innecesaria como propia del Atleti de los últimos años-; en una noche así, se da paso a la alegría y euforia, que se sobreponen a la trayectoria de los últimos años; en un día como este, el cuerpo tiembla imaginando un estadio repleto de atléticos con ansias de un título.

El encuentro comenzó como ni el más creyente de los racinguistas hubiese imaginado; córner regalado por la zaga rojiblanca y botado por Canales sin peligro al primer palo, donde Valera cabeceó erróneamente a su portería. Cuatro goles necesitaban los cántabros y el 1-0 del primer minuto daba un toque fortísimo de atención. Por unos momentos, el caudillo Corocotta y la encerrona sardinera se apoderaron de la fiesta atlética.

El susto duró  poco, cinco minutos después Moratón se amistó con Valera e introdujo con el pie una falta lejana sacada por Reyes al fondo de las mallas. De la esperanza a la desolación total en unos instantes. Siete minutos tan sólo y tablas que condenaban definitivamente al Racing; eran cinco tantos los que necesitaban ahora. Perdieron el ímpetu inicial, el Atlético ya era finalista.

Poco más de sí dio el primer acto, con una intentona rápida de Colsa tras el 1-1 fuera por centímetros y varios disparos de media y larga distancia sin peligro fueron el bagaje blanquiverde; sólo el ‘Kun’ topó con Mario en un par de ocasiones sin excesivo riesgo. 

En la segunda mitad, batiburrillo de goles dentro de un duelo insulso que terminó  cayendo del lado local gracias a la fiesta interna que llevaba el equipo madrileño.

Jurado, tras una gran pared con Agüero, se plantó delante de Mario al que batió con un toque exterior sutil.

Con el 1-2 el partido se convirtió en una pachanga, aunque a ratos adquiría tintes de partido apretado –pique de Reyes con Munitis o expulsión de Christian un tanto rigurosa por manotazo a Ibra-. Éste último salió por el ‘Kun’ y Simão por Reyes, evitando así cualquier tipo de problema físico o reglamentario.

Un par de disparos de Raúl García y un tercero de Ibra fueron el preludio de la remontada racinguista. Un tiro sin aparente peligro de Xisco desde la frontal se introdujo en la portería en el 88’ con la colaboración de De Gea, que tan seguro estaba de atajarlo que no tensó las manos de manera adecuada; apenas un minuto después, un fallo típico de la defensa rojiblanca puso a Tchité el tercero en bandeja, que se aprovechó de la concesión y correteó sin oposición hasta el arco atlético, que perforó por bajo ante un De Gea, esta vez sí, batido.

Diez años después, el Atleti continúa sin ganar a su eterno rival, le cuesta horrores generar momentos de fútbol, la estrella salvadora nació, creció y ya marchó, otra nueva tomó el relevo y amenaza su marcha también, la gestión de la entidad mejor ni hablar…

Pero el Atlético vuelve a sentirse grande, importante; y sus seguidores portarán durante los próximos tres meses y medio más felices que nunca el nombre de su equipo clavado a fuego en el corazón.

Racing Mario; Crespo (Oriol, m. 46), Moratón, Torrejón, Christian; Colsa, Lacen, Munitis (Diop, m. 58), Canales (Serrano, m. 72); Xisco y Tchité. No utilizados: Coltorti; Pinillos y Luis García.

Atlético de Madrid De Gea; Ujfalusi, Perea, Domínguez, Antonio López; Tiago (Raúl García, m. 59), Assunção, Valera, Reyes (Simão, m. 65), Jurado; Agüero (Ibrahima, m. 63). No utilizados: Asenjo; Juanito, Camacho y Forlán.

Goles: