¡Pero, hombre, Gallardón! Los tuyos, los estandartes, en casita. Y a dar la cara los menesterosos, los de la sopa boba.
No hace falta ser augur para entrever el destino de Madrid 2016.´
Lo de La Peineta va a ser de traca. Y tampoco hace falta ser el oráculo de Delfos para predecir lo bien que va a salir todo esto para el Aleti, a distinguir y diferenciar de sus indebidos dueños.