El lío interno del Estudiantes le provoca un paro cardiaco
Victor García.- 18/04/2008
El Estudiantes está metido en un hoyo ‘deportivo’ y en un lío institucional. Con medio pie en la LEB a falta de cuatro jornadas -penúltimo y a dos victorias de los puestos de la salvación- en su corazón circulan rumores, compras de acciones y ambiciones por hacerse con el poder de un club muy especial en la ACB. Símbolo de organización con la cantera como motor de desarrollo, en el último lustro una sombra cubre la gestión que ha llevado al ‘Estu’ a una crisis económica sin precedentes, más de 6 millones de euros de deuda. La misma nube se ha trasladado a las canchas para hacer de lo deportivo un reflejo de lo institucional. O lo que es lo mismo: por qué un empresario no debe hacer de entrenador.
En 2005, Alejandro González Varona tiene que abandonar la presidencia del Estudiantes porque surge una división interna. Por un lado está el grupo de Adecco, antiguo patrocinador; y por el otro una plataforma de socios (destaca el grupo de la Demencia, sus seguidores más famosos) con el lema “un accionista, un voto”. Ambos bandos no se ponen de acuerdo en quién será el siguiente presidente hasta que aparece la figura de Fernando Bermúdez. Es capaz de aunar fuerzas y se le conoció como 'el presi del consenso'. Así, reúne al accionariado y su consejo directivo. Tiene pinta de que todo va a salir adelante: promete vender muy bien parte de unos terrenos en San Chinarro que el Ayuntamiento de Madrid les había cedido para su Ciudad Deportiva. También declara traspasar bien a Carlos Jiménez, última perla de la cantera estudiantil. Por los terrenos no se ha conseguido obtener todavía beneficio y por 'suma y sigue Jiménez' sólo sacaron entorno a 1 millón en 2006 (terminó en el Unicaja), el Akasvayu ofreció anteriormente cerca de 3.
La actuación de Bermúdez en los despachos provocó que miembros del consejo fueran dejando su puesto. Este empresario ha estado ligado desde pequeño al Estudiantes, incluso fue entrenador del equipo hace treinta años. Sus negocios han funcionado y pretendió hacer lo mismo con el equipo colegial y llegó como un ‘Salvador’. Pero las modificaciones realizadas han servido para llevar al club hasta la actual situación. Diferentes jugadores fichados pero con un mismo agente; empresas de las que Bermúdez era socio las contrató para el ‘Estu’ (como Limpiezas Lumen, aunque tuviera que despedir a la anterior) y otras actividades a las que involucró a los trabajadores, como el caso de la Passionata Andaluza.
La Passionata Andaluza, gracias al Estudiantes
Bermúdez es gran aficionado a la música clásica y a los caballos. El dirigente volcó tiempo y esfuerzo en que los del Ramiro de Maetzu colaboraran en la representación de la Passionata Andaluza (música y ballet a caballo), dirigida por Manolo Carrasco. Además de ser también socio del evento, implicó a los empleados de tal manera que la dedicación por el club de baloncesto fue menor. También ha realizado otros conciertos de música clásica organizados por la entidad, con empleados de esta. En uno de ellos, Bermúdez obtuvo más beneficios puesto que con la gestión de los ‘curritos’ colegiales consiguieron algo muy difícil: RTVE compró un espectáculo con arreglos que el presidente había realizado en algunas piezas. Rentabilidad por derechos de autor y por ser representante de algunos músicos.
En lo deportivo, Bermúdez ha querido intervenir mucho desde que tomó posesión del cargo hace tres años. En la campaña 2005/06 declara que asumirá el cargo de director deportivo (ver noticia) y los empleados del club y jugadores le escriben una carta mostrando su disconformidad. Bermúdez da marcha atrás pero señala que esa carta no salga del club estudiantil. En la presente temporada, el ex director deportivo José Asensio abandonó su cargo, al igual que el ex entrenador Mariano de Pablos lo hizo anteriormente. El Presidente comienza de nuevo a sugerir fichajes y a descartar otros. El caso del escolta Andrés Miso escandalizó a la cúpula deportiva estudiantil. Asensio y De Pablos consultan con Bermúdez para contratar al escolta, éste accede y cuando contactan con el representante del jugador, Arturo Ortega, reciben un ‘no’ por respuesta. Bermúdez había dicho a Ortega anteriormente, ex socio y amigo íntimo, que Miso no jugaría en el Estudiantes. También se inmiscuía en la cancha con insinuaciones del tipo de ‘hay jugadores que no merecen estar en el plantel’, como dijo de Gonzalo Martínez. Por último, cuando el técnico De Pablos dimite y contratan a Velimir Perasovic, Asensio también abandona el barco porque se le ha saltado en esta contratación. Con vía libre, Bermúdez realiza sus fichajes para tratar de sacar al equipo de los puestos de descenso: Michel Morandais, Dave Russell, Oriol Junyent y Vitaly Potapenko.
- Michel Morandais ya fue ofrecido a De Pablos a principios de temporada pero fue rechazado por ser conflictivo dentro del vestuario. Desde hace unos días ya no pertenece al Estudiantes.
- Vitaly Potapenko ha jugado unos meses en el conjunto estudiantil y recientemente se ha retirado de la práctica del baloncesto.
- Junyent y Russell no cuentan para el técnico Velimir Perasovic y sus fichas son excesivamente altas para su rendimiento.
El año pasado Bermúdez ya había fichado a Victor Sanikdze y fue un fracaso.
De nuevo, el Estudiantes está roto
En la presente campaña, Bermúdez anuncia su retirada y grandes cambios, como la de dejar el club en manos de Juan Francisco García y el regreso de José Asensio (ver noticia). Nada de eso ocurre (ver noticia), a principios de marzo elige a Javier Tejedor, consejero y patrono de la Fundación Estudiantes, como su sucesor. Éste, de inicio, menosprecia a los trabajadores que había diciendo que es una "directiva de colegio" (ver noticia) y quiere remodelar el club. Al final, Tejedor ha mantenido la línea anterior y, además, se ha ganado mala fama entre los trabajadores. Cuando se enteró que los empleados querían tener un representante sindical cortó el chorro y amenazó con despidos.
El laberinto no termina aquí. En 2005 se aprobó una ampliación del capital con dos objetivos: inyección de dinero para la SAD estudiantil -por sus deudas- y que la Fundación tuviera el suficiente número de acciones como para que el equipo no tenga un solo dueño (no tenga un 'Abramovich'). Este 25 de abril había una asamblea para decidir el futuro presidente del club. Por un lado estaba Javier Tejedor junto a Antonio Pozueco que quieren comprar el club 'a toca teja' -ya compraron acciones a Bermúdez-, y por otro uno vinculado al club durante mucho tiempo, con antiguos patrocinadores, y presidido por José Castellano (máximo dirigente de la Fundación Estudiantes). Pues bien, la Asamblea ha quedado suspendida porque, según Tejedor, se terminó el plazo para los pagos de la ampliación de capital. Con ello, Tejedor ha decidido posponer dicho encuentro hasta… que él quiera. No obstante, la Fundación colegial cree que la actuación del Consejo de Administración es "un dislate legal" (ver noticia).
Panorama incierto tanto en los despachos como en la cancha. La puerta de la presidencia ha taponado esta temporada el aro del MMT Estudiantes y se han fallado casi todos los tiros. El corazón del 'Estu', con 60 años recién cumplidos, está roto.
http://www.elconfidencial.com/cache/2008/04/18/11_estudiantes_cardiaco.html
TENEMOS LA CABEZA EN EL SUELO
D. Enrique Cerezo. Contorsionista