"Shame" es la película de 2011. Impresionante. Ni "A serbian film", ni "El ciempiés humano", ni leches en vinagre. La amargura que te deja esta película, sin vísceras, ni escatología, es realmente jodida. Simplemente ver ese "new york, new york" cantado por la Mulligan ya vale pagar la entrada.
Junto con Melancolía y Drive, aunque ambas por detrás de Shame, lo mejor del año. Es curioso, las 3 han sido totalmente ignoradas por los, supuestamente, premios más populares de la cinematografía mundial. Y luego todavía hay gente que cree en los Oscar.