Kanon: No obstante creo sinceramente que la gente cada vez sabe menos de fútbol. No sé si la Play, los Pedreroles de turno o lo que sea está idiotizando a la gente futbolisticamente hablando. Sólo de esta manera es entendible los palos en su momento a jugadorazos de la talla de Raúl García o del partido de Torres ayer.
Es que yo creo que a la gente realmente no le gusta el fútbol. Son de sus equipos, luego la mayoría de los dos tramposos, y lo que les gusta es el espectáctulo que unos cuantos les dicen, que en general no tienen ni p.uta idea, que tiene que ser el fútbol. Y luego lo que más les gusta es la parafernalía mediática que hay montada alrededor del fútbol, una especie de prensa rosa para hombres (sin que ello se entienda un comentario sexista, porque no lo es, es simplemente un producto diseñado para el consumo masculino porque un "macho" en el bar no va a hacer tertulia en torno a la salsa rosa).
Se hace mucho énfasis en aspectos que nada tienen que ver con el propio fútbol, con el juego, los coches, los musculitos, las wags, los piques político-festivos, y se adorna con espaldiñas, rabonas y sombreritos. En los diarios on-line siempre aparecen cosas como: "mira las 10 mejores rabonas", "mira que caño hizo no sé que gilipollas en el jardín de su casa a su jardinero", "fulanito es un crack, regateo un cono sin utilizar los pies", nunca verás un vídeo destacando una ayuda, un robo, o una presión. A lo más que llegan es a ponerte una pizarra absurda llena de garabatos, ilegible, intentando justificar sus mierdas con algo que no entienden ni ellos, y luego te llega un Arsenal y con menos posesión que el rival le clava 6 y se les desmonta el chiringuito.
El mísmisimo Uria, que hace unos artículos cojonudos, ayer demostró que de fútbol, lo justito. La retransmisión técnica que hizo del partido fue cuanto menos lamentable, repitiendo hasta la saciedad 4 tópicos, sin entender en absoluto lo que estaba pasando en el terreno de juego, con unas valoraciones técnicas de los jugadores para hacérselo mirar seriamente (Correa no tiene definición, llegó a decir, cuando debe ser uno de los jugadores con mayor porcentaje de acierto en definición, pese a que ayer, como le puede pasar a cualquiera, fallara. Que iba a salir Gaitán, -que no salió- porque iba a aportar último pase, y luego cuando salió Saúl, que también valía porque era un jugador diferente a lo que había en el campo, vertical. Y Griezman, Correa, Carrasco y Gameiro qué son? ¿Jugadores estáticos? En fin).
Y luego está la moda de poner barbies analfabetas futbolísticamente hablando -y hasta se podría quitar lo de "futbolísticamente"- a pie de césped para que cada x tiempo, y 10 segundos después de que les pregunten, aparezca su vocecilla para decir, independientemente de lo que les pregunten: "hay que ver como anima el público", - Saúl, va a salir Saúl, le dijo el comentarista con una sonrisita burlona, cuando le preguntó por el siguiente cambio del Aleti, porque según ella no tenía visibilidad -no sé entonces para qué coño está a pie de campo-. Sus comentarios, los de ésta, y los de las demás barbies de pie de campo, rozan el esperpento más absoluto. Y las entrevistas finales no es que sean un manual de tópicos sin interés, es que les falta ponerse a tocarles la tableta a los entrevistados. Y digo yo, anda que no habrá mujeres que sepan de fútbol, muchas, para tener que poner a esas muñequitas que a mí sinceramente sí que me parece un ejercicio absoluto de sexismo injustificado y encubierto por la gran mentira de la paridad. ¿Paridad? y una mierda, igualdad de oportunidad, y si de 10 personas hay 7 tías mejores, pues que estén las 7, pero se metan su paridad políticamente correcta por el orto, y sobre todo que no la utilcen para hacer un ejercicio de sexismo despreciable. Que yo estoy viendo fútbol y quiero que me hablen de fútbol sabiendo, si quisiera lo otro pues me pondría a ver una pelea de titis en el barro.
En fin, sí, lo que decías, ni p.uta idea de fútbol. El partido de ayer de Torres, como le reconoció el propio Cholo, algo que no suele hacer, personalizar, impecable.