Ha tenido que ganarse el puesto empezando de suplente y lo ha hecho en un puesto algo más retrasado de lo que lo ha hecho en el Atleti y ha sido brutal, qué despliegue, qué solidaridad, qué claridad de ideas para ayudar a sacar el balón jugado, cómo se ofrece, cómo llega al área contraria, qué calidad... Es la hostia Koke.
Una bestia parda nuestro chaval, desde luego nada que nosotros no sepamos.