Aquí en Italia no hacen más que comentarme, amigos y conocidos, que cuando Cerci empiece a jugar en el equipo el salto de calidad va a ser impresionante. Me dicen que el calcio spagnolo le va a su estilo de juego mucho mejor que el italiano. Yo respondo que, independientemente de las características del fútbol español en general, las de nuestro equipo le vendrán aún mejor.
Hoy hemos ganado en el Cuerna, sin Antoine ni Arda durante dos terceras partes del partido, sin Cerci, sin que los que deben alimentar a esa bendita bestia de Mandzu hayan entendido todavía sus movimientos, con un Gabi desconocido, muy por debajo de su nivel habitual, con un Siqueira muy gris, sin Ansualdi (quien me gusta mucho y que creo nos dará muchas satisfacciones), con diez jugadores hasta que el vikingüey se fue al banquillo (quien a parte de su cornuda condición terminará ofreciendo mucho al equipo si se adapta, porque cojo no es), con gente como Saúl, Gámez, Giménez y el Cebolla viendo el partido desde la grada... y hemos ganado en el Cuerna.
Ergo: este equipo no puede sino crecer.
Pero, vamos, quien prefiera llorar por los que se fueron, pues a ello. Yo, desde luego, no. Vuelvo a repetir por enésima vez que esta plantilla no me parece inferior a la del año pasado.
Saludos.