Decía Bacharach el otro día que los fichajes parecían haber empeorado el equipo, y ayer dio la impresión de que a la inversa también funciona, y las bajas han mejorado al equipo.No me refiero a las de Godín, Filipe y Juanfran, titularísimos a los que se echaba en falta, sino a la de Jackson -e incluso a la de Augusto, aunque esto es más discutible-.
Jackson era un problema, un tipo sin implicación, descentrado, al que tampoco se quería defenestrar y que ha acabado demostrando ser una castaña. Su juego, y el hecho de que se le dieran más oportunidades que a otros en parecidas circunstancias minaban al grupo. Creo que Vietto y Torres van a rendir mucho más ahora (entre otras cosas, ya no valen excusas comparativas para nadie: ambos han jugado mejor que Martínez, pero peor de lo que se espera de ellos, y les toca demostrar de qué pasta están hechos).
Por otro lado, aunque Augusto el otro día hizo un buen partido en Barcelona, su presencia incitaba a Simeone a reforzar demasiado el centro del campo. Ese Augusto-Koke-Gabi-Saúl es una combinación que puede servir para ciertos partidos pero que aisla demasiado a los delanteros. Antes de navidad -en la racha de partidos sencillos en liga, todo hay que decirlo- parecíamos haber encontrado un sistema más versátil con Carrasco u Oliver, con cierta asimetría que nos viene bien para no ser tan previsibles.
Muy buenos minutos ayer de Carrasco (al que a veces le falla la toma de decisiones, parece mucho mejor cuando actua por instinto que cuando levanta la cabeza y mira), Correa tuvo un buen inicio y un declive (le falta cuerpo o velocidad para ganar los forcejeos), Thomas solo una vez mostró su mejor cualidad, la zancada al romper por el centro, y tampoco se animó a disparar. Los cambios estuvieron excelentes los 3. Cabe destacar lo bueno que es Vietto en la combinación. Como referente no lo veo, no gana una por arriba y por abajo si le encima mucho le cuesta. Pero si la controla, empieza el baile, puede hacer lo que quiera. Luciano luce desenganchándose (lo que requiere que alguien se quede fijando defensas) o cuando las marcas se aflojan. Por cierto, tiene un gesto característico que me resulta llamativo: muchos controles los hace levantando la bola, en vez de bajarla. No parece que sean errores, sino que lo busca así, imagino que para tener otras formas de jugarla y para que el defensa no le meta el pie.