Las expulsiones a nuestros delanteros son de chiste. Momentos como esos y sobre todo a los dopados hay muchos iguales y no pasa nada.
El tener tantos ex-ciervos en nuestro equipo nos tiene muy sensibles, no estamos acostumbrados a ello, a muchos nos chirría, pues pensamos que para fichar a esos hay otras opciones mejores, tanto por nivel de jugador (calidad, entrega y nuestra ideosincrasia) como de precio (que con los golfos da igual), de momento la mayoría son suplentes, la temporada es larga y son jugadores del aleti que eso debería ser lo más importante, su destino es el nuestro, y contamos con el Cholo como guardián de nuestros valores, eso ya debería de bastar para zanjar muchos debates.
Queda mucho camino y muchas piezas por ajustar, ganar es lo más importante, cada vez manejamos más recursos, jugamos a más cosas y tenemos muchas variantes y cambios de posiciones, que tiene su punto malo pues los jugadores deben saber interpretarlas. Y jugadores que juegan y están más cómodos en alguna posición se deben acostumbrar a otras por el bien del equipo. Veremos a ver.
El fútbol es cuestión de gustos, para mí el equipo rocoso, que no dejaba grietas y que desesperaba al rival me ponía mucho, pero también ahora los equipos ya nos dan bastante más el balón y hay que evolucionar y creo en eso llevamos ya unos años, ahora con el añadido de muchas novedades. Confianza en el Cholo, no consumir, molestamos y en base a ello actúan los trencillas.
Lo que siempre nos ha hecho fuertes: prietas las filas.