Y este árbitro es supuestamente de los más objetivos... estamos apañados. Mateu perdona las faltas que los ciervos usan para decantar el partido a su favor. Siempre falta tras robo para cortar la contra, siempre más duro que nosotros porque saben que los va a proteger. Ellos se dedican a robar (el balón en este caso, pero en general robar va en su adn) y correr, y el resto del tiempo a sobar bola. A nosotros cada presión más intensa nos cuesta tarjeta, y dejamos que nos correteen por no ir duro. La realización tampoco mostró varias jugadas que a mi me parecieron dudosas, se dedicaban a repetir las maravillas de Vinicius -sigue pareciéndome un jugador limitado, pero cuando la pasa es mejor que cuando tira-. En fin, todo perfectamente atado. Y en cuanto a nuestra ausencia de protestas, esa es la consecuencia de los arbitrajes de las primeras 10 jornadas, donde nos masacraron cada vez que abríamos la boca. Se os olvida que hemos sido el equipo más sancionado y el que menos faltas hacía. Ya no habla nadie, y no por falta de ganas, sino por condicionamiento operante.