Atlético de Madrid y Barcelona pueden hacer estallar una bomba en este último día del mercado de fichajes. Porque los dos clubs están valorando la posibilidad de que Álvaro Morata vista de azulgrana esta temporada, en una operación que afectaría a Antoine Griezmann.
En el Metropolitano auguraban un cierre tranquilo, pero la inminente salida del Barcelona de Aubameyang, que ya está en Londres, y la posible de Memphis han llevado al club catalán a preguntar por un jugador al que ya quisieron en el pasado para reforzar el ataque.
La continuidad de Morata en el Atlético ha estado en el aire durante buena parte del verano pero tras la buena pretemporada e inicio de Liga realizado por el madrileño, se daba por hecho que seguiría. Era su principal deseo, pero la aparición del Barcelona sobre la bocina podría cambiarlo todo.
El asunto Griezmann
Este jueves, desde primera hora de la tarde, se han sucedido los contactos entre Barcelona y Madrid para analizar la viabilidad de una operación que afectaría a Antoine Griezmann. Porque el Atlético lleva tiempo tratando de presionar a la entidad azulgrana para que rebaje la cantidad de 40 millones de euros que deben pagar desde el Metropolitano el próximo verano si se cumplen las condiciones firmadas, es decir, que juegue con normalidad a las órdenes de Simeone, algo que ahora no se está produciendo pues ha entrado en los tres partidos de Liga pasada la hora de juego.
La operación consistiría en la cesión de Morata esta temporada al FC Barcelona y, el el próximo verano, el internacional español pasaría a ser propiedad del club catalán y Griezmann del Atlético, anulándose esos 40 millones. Es decir, un cambio jugador por jugador.
Se trata de una operación muy complicada a realizar en estas últimas horas del mercado de fichajes, pero en el Metropolitano y en el Camp Nou, la están estudiando.