En primer lugar diré que no soy creyente, más bien al contrario y que las lecturas me importan más o menos lo mismo que la bondad personal del Mata, es decir nada, aunque también diré que soy conocedor de algunas de ellas, un diez en Teología, y sin copiar, me contempla. Dicho esto, la oveja descarriada, no me vale, y mira que siempre estoy al lado de las ovejas descarriadas, pero de las malas de verdad, no de las que pasan de lavar piececillos a ladrar como lobos.
No voy a contratacar con la 20:8 del Apocalipsis (reconozco que la he leido ahora y no sería mala, no), como tampoco me parece mal la 20:11, que estaba al lado "y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado sobre él", en este caso lo que todo el mundo ha visto ha sido una asquerosa camiseta blanca, y al que la enseñaba al viento con sonrisa feliz, todo un fulero él.
Pero simplemente contestaré, en cuanto a lo de Lucas, (que a mí me venía por ser del que todo el mundo se despide) que vale, que vengan cuantas ovejas quieran, pero a algunas las seguiré teniendo en el punto de mira, no por si son negras, no, pobrecitas mías, sino por si debajo aún esconden al lobo que está esperando otros aires para volver a su verdadero redil (que contrasentido para un lobo).