Estimados compañeros:
Me vais a perdonar que abra este post y que le dé un poquillo de cancha que no se merecen a los palanganas, pero quisiera recordaros algunos acontencimientos de la historia cerdillista, ahora que está tan de moda lo de la memoria histórica.
Por todos es conocido la grandeza del Cerdilla. Club grande entre los grandes, numerosos títulos jalonan su dilatada trayectoria deportiva (por supuesto, muchos más que la nuestra, que somos "un Burgos o un Logroñés de décadas atrás", dónde vas a comparar). Innumerables son las tardes de gloria que ha visto Nervión. Pero entre todas ellas, sin duda alguna, hay una que destaca por derecho propio, por apoteósica, grandiosa e inolvidable, y es la de una agradable tarde de otoño de 1997 que un servidor nunca olvidará:
¡JUAS, JUAS, JUAS, JUAS...!
Ahora, que píen los palanganas, que vengan a presumir de sus títulos de nuevo rico conquistados ante "potencias" del fútbol continental como el Middlesborough, el Filial Catalán del Baba$ o el Getafe, pero lo que nunca van a poder cambiar es la Historia. Y la Historia dice que un 25 de octubre de 1997 estos ojitos que se van a comer el mundo vieron cómo UN FILIAL, NUESTRO FILIAL, se pasaba por la piedra y humillaba a ese Grandísimo Equipo del Sur de España y del Mundo Mundial. Y eso es una humillación que yo, si hubiera tenido la desgracia de ser cerdillista, no habría podido olvidar en la vida.
Por eso, a partir de ahora, propongo que cada vez que nos refiramos al Cerdilla, lo hagamos como el Rival Histórico de Nuestro Filial (siglas, RHNF). ¿Quién dijo que el Cerdilla nunca había sido rival nuestro? Pues claro que lo ha sido... pero del Madrileño.
Por cierto, para que luego digan los periodistas que no ganábamos en Nervión en liga desde hacía 15 años. Vaya panda de indocumentados. Un saludo.