Sólo he visto el partido contra el Arsenal, porque estaba circunstancialmente en Madrid.
No me voy a rasgar las vestiduras. Primero, porque es pretemporada; segundo, porque viendo la plantilla, tampoco puedes alimentar muchas expectativas. Así, pues, me limito a dejar unas impresiones, sin más.
De los nuevos: el portero, que tuvo escaso trabajo, de todo. Buenos reflejos, pero atisbos de indecisiones en las salidas, que no me gustan ni un pelo. Juanito, lo esperado. Vamos, que no lo veo un refuerzo. El defensa uruguayo, malas sensaciones. Lateral, al menos, no es. Los chavales de arriba, buenos detalles, que en el caso de Pacheco, me parecieron detallazos.
De los viejos conocidos y retornados, nada nuevo. Reyes, en su papel. Jurado y Santana, con dar los dos mejores pases de todo el partido, no me vale juzgarlos por jugar media hora, cuando el partido se empezaba a romper, que es cuando más fácil es lucir. Yo, prescindía de todos ellos. El problema es cómo lograrlo.
De los que sostienen el equipo, pues lo dicho al principio, son bolos. Cuando llegue la hora de la verdad, creo y espero que sean ellos de nuevo.
El equipo como tal, pues lo esperado, como dije. No hay más cera. Sin juego por las bandas, ni para atacar ni para defender, y sin calidad en el centro del campo. Incapaces de sacar un balón jugado, en consecuencia. Y encima, si se concentran en defender, en presionar y mantener la línea, es como si el cerebro ya no les diera para más, como si agotaran sus energías mentales. Energías que luego, por momentos, es como si sufrieran un apagón. No ya por las jugadas de los goles, sino mucho antes, en cuatro o cinco ocasiones, en que la defensa se adelantaba tirando la línea del orsay, y los que estaban por delante -los que deben presionar a quienes llevan el balón o estar pendientes de sus pares/zonas para que no den cómodos el pase filtrado o no rompan con una entrada desde atrás- como auténticas estatuas de sal.
Si los sostenes del equipo quieren, no se cansan y no se lesionan, veremos algo parecido a lo de estos dos últimos años. Si no es así, apaga y vámonos.