Yo creo que habría que ir cambiando la doctrina sobre los cierres de los estadios y hacer esos cierres parciales.
Por ejemplo, en tanto se localiza la famosa piedra, cierre del palco. Los canapés del descanso que se sirvan en las escaleras.
Cuando se localice la piedra y mientras se hace una rueda de identificación con otras piedras, cierre de los aseos y de los puntos de venta de bocadillos y refrescos. Que venga todo el mundo bebido y meado de su casita.
Una vez que la piedra culpable se someta a juicio, con jurado popular, cierre de los banquillos. Los suplentes que se pongan la manta alrededor de los banderines del córner.
Y ya por último, con condena firme, como se recurrirá previsiblemente la misma, cierre de las porterías, se ponen las redes al revés y que se busquen la vida los jugones.