A mí tampoco me hace mucha gracia el cambio, en Liverpool siempre le han tratado muy bien, le han querido mucho, y da pena verle salir de allí. En el Chelsea, además, le va costar, porque jugará en un equipo que roba muy arriba, que ataca sin espacios, y en el que jugará junto a un futbolista que como él ocupa muchísimo espacio. Y su afición es bastante fría. No le va a resultar fácil. Es un reto difícil, muy bonito.
Veo que los hay que se quejan del timing del asunto, pero a mí el momento me parece tan bueno como cualquier otro, que al Liverpool le queda medio año de jugarse nada, lejos de todo en la liga, fuera de la copa, y con el único aliciente de una competición menor. Mejor ahora, una vez que has comprobado que el equipo acepta resignado su rol secundario (¿traspasas a Mascherano y fichas al suplente de Felipe Melo? ¿y llega el invierno y sólo fichas otro nueve?), dandoles medio año para rearmarse, que en verano, entre promesas.
Pero en todo caso no creo que su salida se deba sólo a un problema de ambición. Hace tiempo que no se le ve cómodo en Liverpool. Da la impresión de que en los dos últimos años de Benítez se formaron dos bandos en ese vestuario, con los históricos, Gerrard y Carragher, a un lado, contrarios al entrenador, y los Torres y Mascherano al otro, a su favor. Y tras la marcha de Benítez a Torres nunca se le ha visto feliz. Hodgson solía tapar sus miserias aludiendo al estado físico de Torres, se empezaban a deslizar rumores de futbolistas reprochando a Torres su comportamiento en los entrenamientos... Y claro, una cosa es estar en un equipo perdedor y otra estar en un equipo perdedor en el que empiezas a ser la excusa, que él por eso ya paso. Una cosa es ser el clavo ardiendo y otra ser la piñata. En esas circunstancias es mucho más fácil optar por un cambio que al fin y al cabo te lleva a un equipo estabilizado en la élite, a una ciudad con mejores equipamientos, por decirlo suavemente, y ganando mucha más pasta.
Pues eso, que a mí me deja una sensación agridulce. Pero mira, el hecho de ver a los vikingos mosqueados y a sus habituales haters rabiando, la verdad, me la hacen mucho más llevadera.