MAG: aquí tienes tu premio por ir a chupar pollas a Marca. El martes declaras que jugará seguro aquí el año que viene y fíajete la semana que te están dando.
Mandas a Forlán para que lave la cara y el uruguasho dice que no siente el escudo porque es un profesional. Pues aunque no hayas crecido aquí (otro mal endémico nuestro) ya deberías saber que eso es de mal profesional. Y declararlo más, siendo capitán. Y mientes cuando dices que te entregas. Ayer vi en el canal Barça la repetición del 5-2 de la temporada pasada (con Cleber, Abel, Jurado - por Dios, que la gente vea este partido y diga si se le echa de menos, aún Maxi...) y corrías, te cabreabas, defendías, celebraste el 4-2, te encendías cuando no llegaba juego y tenías una cara de hundido que no veas por perder. Eras otro, así que no nos mientas más.
MAG: para nosotros eres un ladrón hijo de p uta. Para los demás, un pelele.
Eres un tonto de baba que va de ejecutivo master del universo (pagando a Mendes para que te declaren mejor directivo del año, hay que ser paleto para creerse que eres lo que pagas, es como si vas de putas y piensas que follan contigo porque se han enamorado de ti).
Un tipo que se cree un campeón del poker y no sabe ni lo que es una escalera.
Y todo va sumando. Le venderán (mal... que si llegara un equipo nuevo a esta directiva podría entender hasta que vendieran todo si tuvieran un plan) y nosotros recogeremos restos de la cantera blanca hasta convertirnos en un Getafe bis (gradas vacías, por cierto). Y, de complemento, jugadores brasileños que no jugarían en la playa de malos o de intranscendentes a precio de estrella. O argentinos que cuando niños en el barrio debían ver, sentados en la rúa, cómo jugaban los buenos de verdad. Que le dan una patada a un bote y el bote se siente mierda.
Un dirigente de mierda que se cree un adelantado del marketing y del branding (promoción de una marca).
Un delantero centro que se cree un intelectual.
Dos estúpidos a los que su ombligo no les deja ver el bosque. A los que su alma (¿tienen?) no les deja ver el sentimiento de lo que es un club. De lo que es el fútbol. Una pasión por la que muchos tienen una razón para aguantar la semana, esperando el domingo para sentirse parte de una gran familia. Algo heredado de abuelos, padre. Compartido con hermanos de sangre y otros que no lo son pero como si lo fueran.
No. Ellos son los inventores de la gestión deportiva y del fútbol como status profesional. Tiene huevos la cosa. Y mientras, la prensa madridista defendiendo la sinceridad de Forlán (de MAG ya ni hablan porque no pueden ni defenderle sin reirse). Pregunta: ¿si dijera eso Ramos, Casillas o Ronaldo dirían lo mismo?
Decís de la Alternativa. La verdadera, la que va a cambiar todo, es su incompetencia. Es una incompetencia enciclopédica.