El esperpento ha sido de tal calibre que, en mi opinión, deberían volverse andando a Madrid. Y a entrenar cuando llegaran, pero con un saco de piedras a la espalda. Previa destitución inminente del psicólogo, claro está.
Con que hubiesen tenido la décima parte de güevos de los que ha sacado el Albacete, hubiesen sacado un resultado positivo. Y eso es culpa clara del alineador. Independientemente de la calidad, mejor dicho, de la falta de calidad de algunos componentes de la plantilla.
Por otro lado, a mi no me ha disgustado Pulido. Al menos, no tanto como otros...Por cierto, que fichen al Calle ese. ¡Que forma de romper cinturas en la expulsión de Dominguez, oigan, que imagen...!
A lo que yo veo, amigo Sancho, estos no son caballeros, sino gente soez y de mala ralea. Dígolo, porque bien me puedes ayudar a tomar la debida venganza del agravio que delante de nuestros ojos se le ha hecho al Atlético de Madrid. (El ingenioso hidalgo D. Quijote de la Mancha. Versión libre adaptada).