La indignación por no traer a nadie es la misma con o sin Jackson y Siqueira: no haber fichado a nadie cuando tenemos la espada de Damocles de la sanción es un ejemplo más de la magnífica gestión de los dirincuentes del club. Salvo improbable milagro, vamos a tener que aguantar con lo puesto -llevamos un par de mudas: Borré y Borja- hasta verano de 2017. Tremendo despilfarro no darle al mejor entrenador del mundo un equipo para ir a por todas.
Pero una vez consumada la ausencia de fichajes, que vendan a Jackson no me importa, no perdemos nada futbolístico ni a nivel grupo (con Siqueira no lo tengo tan claro, porque hay más sanciones y menos combinaciones posibles, por más que como jugador sea una calamidad). Jode que se lleven la pasta los de siempre, y jode que nos tomen por tontos -con razón, vistas las reacciones del populacho-, y jode que todo el tingado estaba montado para especular, saliera el melón bueno o malo. Pero quedarnos con el melón pasado en la nevera no solucionaba nada, y apestaba bastante.
Imagino que el teatrillo del fuera de plazo es para evitarse explicar que en realidad esos 42 millones no se pueden gastar en nadie, porque a nosotros nos corresponde solo la parte que pagamos... y entonces hay que explicar que nuestra superinversión de verano, la que obligaba a Simeone a "jugar bonito" también era mentira... y entonces habria que inventarse algo, por ejemplo explicar que nuestra estrategia es el decrecimiento, por eso de la responsabilidad ambiental, de ahí la constante desinversión.
Decir una verdad así suelta pues vale, el problema es que una verdad te lleva a otra, entras en una espiral de sinceridad y eso no puede llevar a ninguna cosa buena. Una mentira grotesca a tiempo ahorra muchas explicaciones.