Pero KIKO19, es que la primera parte fue un constante día de la marmota, donde nadie tocaba una bola.
0. El Alavés la pierde
1.Saque de Oblak en largo
2. Escasa pelea que da lugar a
2.a. Recupera el alavés, que la medio rifa. Volvemos al punto 0.
2.b. El balón le cae a un rojiblanco.
3. Circulación lenta hacia atrás, que acaba en los pies de Felipe. Balón largo, que supone volver al punto 2.
No hubo nada más en la primer parte. Las pocas veces que recuperamos balón, el Alavés, muy bien entrenado, hacía falta inmediatamente, cortando cualquier posibilidad de contra. Como no hubo tarjetas por reiteración, la estrategia de cortar juego en falta una y otra vez les sale muy bien, y nos ahogan las contras. La única solución al bucle es la que Thomas demostró en tan solo cinco minutos. Pedirla, y asumir riesgos en la salida. De hecho, uno de sus primeros pases es una pérdida peligrosa. Pero claro, la alternativa era un Llorente penoso, tapado detrás del atacante, y que no ayuda nada. En una jugada a finales de la primera parte se vio a Saúl bajar a ofrecerse ante la inoperancia del rubio repeinado. Tampoco Herrera quiso meterse en ese fregao. Con ese plan, ni Lemar ni Correa participan en el juego, quedan anulados por completo. Tal vez Morata podía haber bajado más balones, pero poco más. En la segunda empezamos a tener el balón por dentro y por abajo, y entonces sí vimos a Lemar y a Correa, y no los vi mal.
Creo que lo que dice Simeone que se va aclarando es que ahora mismo no puede prescindir de Thomas y Koke, los que dan fluidez al juego, y que el vikingo de cuna puede quedarse en Álava, donde seguramente apreciarán mejor sus virtudes. Creo que su titularidad era un examen, una oportunidad de demostrar, en el estadio donde mejor ha jugado nunca, que merecía entrar en la rotación. El resultado, un suspenso rotundo. Desde la actitud (no solo su cobardía y falta de ayuda a los compañeros, sino también con esa entrada que nos podía dejar con 10, sin sentido) como en aptitud (no sabe situarse para dar salida, y con el balón en los pies es lento, torpe y carente de creatividad). Herrera no queda tan marcado, pero tampoco supo arreglarlo. Creo que Costa va a tener su propia reválida ante el Sevilla, una de sus víctimas preferidas. Morata está haciendo goles, y siendo un delantero mucho peor (ese tiro al muñeco cuando entra solo es criminal, puedes hacer mil cosas, y puedes fallar de mil maneras, pero no tirar así, a bulto) le está comiendo la tostada de mala manera. Espero ver al Costa de las grandes noches pronto, porque es imprescindible.