O a Manzano, Julián. Si me apuras hasta a Ferrando, con el que nuestra defensa,- similares jugadores -, no era el actual coladero.
Tampoco es Caparrós una de mis debilidades más ya le quisiera en vez de Aguirre. Al menos habría algún orden.
Curiosamente se exige al Emery valencianista,- solo algunas semanas de trabajo -, más que a Aguirre con dos años más de rodaje en el mismo club.
Emery ha dado dos baños al Trampas con Almería,- una victoria y una derrota en la que sufrió un robo memorable -, con Valencia otra victoria de dos partidos. Los resultados de Aguirre los conocéis. No olvido que el gol anulado a Perea debió suponer el empate.
Si al final de la primera mitad de la liga la tónica valencianista es la del segundo tiempo del pasado domingo, no tendré inconveniente en admitir que Unai no da la talla. Tiempo al tiempo.
A lo gravísimos errores de ese pésimo entrenador nuestro en las temporadas anteriores, ya comentados, añadiré los aun más graves de la recién comenzada. Como no quiero extenderme los dejo para comentar más adelante.
Mi comprensión para quienes defienden a Aguirre sin convicción,- creo que una mayoría -, pensando que ello debilita a la cúpula dirigente. El perjuicio es doble pues de momento le tienen de tapadera de sus actos lesivos hacia el Club: no protesta si le venden a Torres, Forlán o quien sea; ni protesta si no le traen a Riquelme y culpan a él de la decisión. Donde van a encontrar otro escudo semejante. Además, siempre queda tiempo para defenestrarle si las cosas se ponen peor y salir del paso.
Mi repulsa para quienes,- alguno habrá -, pueda justificar al mejicano por no admitir su desconocimiento futbolístico.
Nada repulsivos saludos.
Ramón