La Asociación Señales de Humo, tras la Junta Directiva celebrada ayer
lunes para analizar el auto judicial recibido, desea comunicar a la
opinión pública en general, y en especial a la afición del Club Atlético
de Madrid que:
Por auto de la Audiencia Provincial de Madrid se
decreta el sobreseimiento de la querella criminal por el presunto
delito de injurias, interpuesta por Miguel Ángel Gil Marín a razón del
informe encargado por ASdH al Bufete Cremades-Calvo Sotelo. Las
conclusiones de dicho informe no fueron del agrado de Miguel Ángel Gil
Marín, condenado en 2004 por el Tribunal Supremo por estafar al Atleti,
que se personó e involucró al Club Atlético de Madrid en esta acción
judicial. Según describe el propio auto, la documentación aportada por
la Asociación Señales de Humo a Cremades-Calvo Sotelo "consistía en datos publicados obtenidos de registro, prensa y documentos judiciales"
desestimando de plano las alegaciones del dirigente del club que, a
pesar de aparecer su propia firma en algunos de estos documentos como,
por ejemplo, las cuentas anuales de la entidad, ponía en duda su
veracidad.
La Asociación quiere subrayar que la literalidad del
auto, donde queda demostrado que la rectificación del informe inicial
-causa de la querella- por parte de Cremades-Calvo Sotelo "fue
redactado e impuesto por los representantes del club tras mantener
conversaciones en las que se les adelantaba la interposición de acciones
legales, y por tanto, las expresiones inexactas, incompletas y
erróneas, referidas al informe, y recogidas en la rectificación del
mismo venían redactadas por el club y por tanto a ellas se tuvieron que
adherir".
La indefensión absoluta en la que cayó la
Asociación, como consecuencia de una nueva práctica irregular e ilícita
del máximo gestor de la entidad y sus asesores, ha quedado patente. Pero
una vez más, y ya son muchas, los dueños de la S.A.D han vuelto a
sufrir un revés judicial. Este nuevo revés se ha producido pese al
cambio de representación jurídica por parte de Gil Marín al que
representa ahora el letrado José Antonio Choclán, abogado entre otros de
Francisco Correa en el conocido caso Gürtel, cuyos seguramente
abultados honorarios nos tememos pague el Club Atlético de Madrid.
Con
este paso, que significa un golpe muy duro a la ya denostada
credibilidad de Miguel Ángel Gil Marín, se rechaza una vez más la
pretensión del Consejo de Administración de acallar la crítica sobre su
gestión, y evidencia que es la vía judicial el principal camino para que
la afición atlética recupere el control de su Club. Incluso se
destierra el infundio de los dirigentes de achacar al control judicial
la falta de rumbo deportivo, pues desde que ASdH acordara en 2009
denunciar en sede judicial decisiones contrarias a Derecho, el equipo ha
conseguido enderezar una trayectoria mediocre hasta alcanzar títulos a
los que los atléticos estábamos, y debiéramos estar, habituados, en
virtud de la historia y la categoría del Club.
Agradecemos de
antemano la difusión que puedan dar a esta información, que consideramos
merece cumplido eco ante la opinión pública, toda vez que, en su
momento, se puso en duda la credibilidad de esta Asociación cuando se ha
evidenciado, una vez más, que solo persigue lo mejor para el Atleti y
su afición, denunciando el ejercicio irregular de poder y el
oscurantismo que rige en el Club, auspiciado por sus propietarios
ilegítimos. LA SOCIEDAD DEBE ENFRENTARSE A LA LACRA DE LA CORRUPCIÓN, CUYO PARADIGMA SIGUE SIENDO JESÚS GIL Y SU HERENCIA.
Puedes descargarte el Auto de la Audiencia Provincial de Madrid (4 páginas) haciendo clic AQUÍ