Todavía me estoy pensando si gastarme un par de euros en unas cañas para el partidito, me puedo llevar un alegrón y continuar bebiendo, o tragarme el más que posible trámite y acabar de mala leche...
Supongo que en lo que vuelvo a mi barrio, escucharé la radio y si la cosa va medio bien (con 0-0 en los dos partidos al descanso me conformo), me acabaré animando.
¡¡Que Neptuno reparta suerte, señores!!. Aupa Atléti.