Amenazaba lluvia en el Calderón, y por unos momentos fué tormenta. El Puente de San Isidro seguía ahí, dando paso a los del otro lado del Río. Como ahí seguían los primeros puestos nada más cruzarlo. Con su iconografía del Atleti, y otro repertorio adyacente; alguno rozao y otro a años luz, pero que debe de venderse porque los tenderos no son tontos. No estaba la bufanda verde y oro, y algunos preguntaron haciéndose los suecos. De momento, les resulta un artículo para ET o la Amenaza Fantasma. Veremos.

Cuando llueve, el Calderón se hace menos inhóspito: no se nota mucho la mierda. En los asientos. En los asientos de Grada general, me refiero. La otra, sí. Por mucho que se disfrace, se nota. Nada más dar el minuto 19 el viedomarcador, alguno se arranca con tres bravos "que se vayan, de una pvta vez". Curiosamente, los niños se escandalizan menos a su alrededor que los mayores. Será por la palabrota... La Grada deja alguna bufanda verde y oro, muy pocas, como corresponde a todo movimiento en pañales. Los coloridos chubasqueros, además, terminan por apagar su tenue luz. Sí, he dicho luz. Habrá un porcentaje, entre alto y bajo, que creía que aquella tarde aquello iba a ser un green & gold total. Llamarles ilusos, quizás sería injusto... En muchas ocasiones, no han estao en la dura guerra de currarse algo desde la base. O, cuando lleguen a ser padres, piensen que en el paritorio no van a encontrar a su querido bebé, sino a un hijo vestido ya de peluso, a punto de entrar en el cuartel donde le ha tocao hacer la mili.

Cuando todavía no llovía a mares, el "diles que se vayan" fué entonao con solidez desde el Fondo Sur. Con la misma palabrota, pero ya los talluditos no miraban igual a los que se sumaban. Pocos, dicen... Bueno, suficientes. serían aproximadamente los varios miles que acudieron aquella manifestación alrededor del Calderón hace un par de septiembres. También acompañaron el "gil ¿ladrón?, fuera del calderón". Como si les fuera el alma. Y acompañaron los dos cánticos del Himno del "Calderón" y del Metropolitano... Y alguno más. Aquella tarde, dieron la mano a muchos cánticos que salieron del Fondo Sur. Son los que no van a soltar la mano del Atleti.

 

Después, la lluvia acabó por dispersar a casi todos. Otros, se quedaron de pie; entre intentando tirar del carro y anonadados. De como esas melodías se plagiaban en su tono para arremeter contra el (pésimo) árbitro o un jugador en concreto. Bastantes, reían la gracia alrededor. Es que el Atleti, es muy gracioso... Casi 3 meses antes de la de finales de Abril, se oyeron muchos y buenos cánticos insospechados en el a priori plácido día que jugamos contra el Athletic. Unos cuantos los siguieron a voz en grito, otros muchos no. Debe de ser como las manis, en las que 200.000 pollos acuden por todo un país. O los ejércitos, en el que parecida cantidá se pegan por el idéntico País. El Atleti, por H o por J, conserva un número inmenso de "masa neutra". Les escondieron el Club, y viven entregados al Equipo. Y sin mucho ruido, por favor, si no es pa ciscarse en el árbitro, en el rival o en cualquier elemento ajeno a la zona "noble". No van a estar ni en la guerra, ni en la paz. Acaso, como mucho, puedan llevar una prenda verde y oro colgada de su cuello, pero se retirarán a segunda o tercera línea en cuanto suene el primer tiro. Quienes crean que esto va a ser un movimiento mayoritario, van daos. Eso sí, debe de ser lo suficientemente mayoritario entre los más implicaos, como pa que no pase desapercibido. Y hoy, el cronista se va jodido por el resultao en el campo, y orgulloso por el de la Grada. Porque los "implicaos", han dao el callo. Con mención especial a los chicos del Fondo Sur, dónde un día algunos de nosotros dejamos un pedacito de nuestras vidas.

Seguiremos informando en próximos episodios. Absténgase los "neutros" de momento hasta que la idea se propague, porque aquí no se habla de árbitros, de rivales, ni tan siquiera del Equipo. Se está hablando del Club. Sin SAD: "¡Atleti, somos nosotros!"

 

Y el día que lo dudemos, nos haremos de Telefónica. O de Repsol, qué más dá...

 

S I E M P R E A T L E T I.-

S I E M P R E C L U B.

 

REVOLUCION O HUNDIMIENTOS, nosotros decidimos...

 lo que hay es lo que hay...puede que vaya sumándose alguno, pero no me cabe duda de que no habrá deserciones...

Hola amigos,

Aprovecho la oportunidad que me brinda el foro para presentarme después de varios años leyendo y opinar sobre la labor fundamental de la verde y oro.
Además de ser un arma de protesta pasiva como ya se ha comentado anteriormente en otro post, cuando se conozca bien su significado y en el Calderón empiecen a florecer, los que quieren protestar pero no se atreven ya que se sienten intimidados se encontraran más arropados.

Me fastidia mucho decir esto, pero tras el partido contra el Athletic salí del estadio reforzado en la lucha y muy satisfecho al ver esas bufandas protestando en la grada. Por fin en el próximo partido luciré la mía, alzaré la voz y porque no, también lo harán los que me rodean,

saludos.

Bienvenido seas, tu y todos los que te acompañen en el camino.

Nunca es tarde para seguir sumando. Sumando a favor del Atleti, aunque muchos por ahí fuera aún no lo entiendan.

Bienvenido

Que Cochise sea un genio que escribe de gloria (aunque no comparta el abuso del "ao" y otros vulgarismos, usados quizá para rebajar el tono de su gran prosa) es algo sabido. Pero creo que de vez en cuando conviene recalcarlo. Pues quede recalcao.

Saludos.

P.d.: sea muy bienvenido el nuevo soldado.

P.d. bis: joder, ¿os acordáis de la alegre musiquilla de "Crónicas de un pueblo": http://www.youtube.com/watch?v=jK6noEEMpHk), mecagüenlaputadoros qué tiempos y cuántos sueños intonsos...

 Crónicas de un pueblo (II)

 

Las farolas que se yerguen sobre el Puente de San Isidro, oteando desde sus bombillas el meandro del Manzanares que abraza los oestes del Estadio, tenían algunas pegatinas en sus tobillos. Algo contra las SADs, en letras verdes y amarillas. Los mismo colores, se repetían sazonando un bar no cualquiera a la espalda del Fondo Norte. Antes de llegar a sus concurridos exteriores, donde igual se puede fumar que echarse un cigarro, una pancarta secaba su tinta  al sol de la tarde, tumbada sobre un seto. Dibujaba en rojo odio, un rostro en arco bajo un texto que no recuerdo bien. Lo mismo ponía "culpable", que "hijo de la gran". Como fuere. Un rato más tarde, pendería poniéndose de puntillas sobre el Córner de Pantic. Con su guardia de corps a la verita de las bridas, como procede según manual. No hubo amago siquiera de retirarla por parte de los inculpaos entre su tela. Normal; el retratao estaba a esas horas gastando sopa por la M-30. "Si quiere, que venga él y la retire", podría haber pensao la otra parte del dúo dinámico, desde su sillón donde antaño insultaba a sus socios.

En Grada, bastante bufanda verde y oro. No menos de 25 ó 30 alrededor de aquella esquina donde muere el Fondo Sur y nace la Lateral. Nada más. Los cánticos contra el palco ocupado de un Estadio que pretenden desocupar, solo llegaron cuando abajo el Equipo palmaba. Normal; la peña solo protesta cuando le bajan el sueldo, cuando se lo suben como que no dá pa estos menesteres. Es lo que también le pasa al inquilino impenitente de la vía de circunvalación: solo protesta cuando una editorial no le dora la píldora. Así que, lecciones, las justas.

La gente, se interesa en buen grado por esa extraña bufanda que portan tipos que se ciscan en el árbitro, cantan el Himno y reclaman un fuero de juego inexistente, como ellos. Parecen de otro planeta, pero resulta que sí, que son del Atleti...
- ¿De qué va esta bufanda?- preguntan con interés
- Contra la SAD. Contra todo presidente que no haya sido votao por sus socios.
- ¿Y consejeros delegaos...?
- Por descontao, caballero, por descontao.Esos, suelen ser los peores...
- ¡Ah!, pues me parece de pvta madre. Es que he visto que hay muchas, y quería preguntar...
- Pues habrá más, se temen. Los que quieran seguir haciendo del Atleti un coto cerrao.

Ayer, hasta cantaron a favor de Quique aficionaos a los que no les hace poco o nada de tilín. Dá igual, esa no era la cuestión; ese no era el mensaje. Se sumaron la jartá de hinchas que creen que le han descojonao el Equipo (precedentes tenemos, como en aquél anterior Doblete del 96), con la otra jartá que piensa que vale ya de entrenadores-escudo y directores deportivos ídems, por muy malos regulares o cojonudos que sean. Son 24 años, que se dice pronto. Creyendo, que el Atleti eran otros. Lo representaban otros. Luchaban por él otros. Lo servían otros. Que además, ponían el dinero... Cada vez, alguien por la Grada canta con mayor fuerza "¡Atleti somos nosotros!". Casi con más ímpetu que el "gil, ladrón, fuera (acude) del (al) Calderón". Este último cántico es explícito con un golferas. El otro, con todos los golferas que se intenten perpetuar sin el voto de los que realmente son del Atleti: sus socios.

Ambos son necesarios. Como esas bufandas verde y oro. Como esos "Atléticos por el Cambio". Como todos esos que acuden tras los nefastos partidos a ciscarse en los goznes sordos de la Puerta 0. Como los tipos de las pancartas políticamente incorrectas. Como los que se dejan la piel por seguir teniendolos de juzgao en juzgao. Como los que se abalanzan como lobos en los comentarios de las ediciones digitales-felación... TODOS somos necesarios. Como en los ejércitos, cada cual en su papel.

Prietas las filas. Está llegando una artillería que nunca hemos tenido en nuestras manos. Navajeros y trabuqueros de esos Atletis de Dios y del Demonio. Aprendamos a manejarla con inteligencia, paciencia y tesón.

S I E M P R E   C L U B.
S I E M P R E   A T L E T I.-

plas plas plas

Eres un crack

 Espero y deseo que estas brillantes crónicas de un pueblo den paso, no tardando mucho, a la crónica de dos "muertes" anunciadas...

Un abrazo.

 Crónicas de un pueblo (III)

 

Algunas pancartas se secaban al sol de finales de febrero de Madrid. Porque Madrid, tiene dos equipos grandes, y dos aficiones numerosas que contribuyen con idénticos impuestos a que los represente un club y una SAD. Esto es, en el Madrid "demócrata" de inicios del siglo XXI unos cuidadanos pueden votar a su presidente, y otros no. Ya saben, para que pueda existir un rico es menester que se vea rodado de unos cuantos pobres. Y si a los pobres los dirige el señor Monipodio, pues miel sobre hojuelas.

La tarde soleada hacía que resplandecieran aún más aqueña extraña plaga de colores verde y oro. Curioso, en un Imperio Rojiblanco por excelencia. Curioso para unos cuantos, los aficionados que preguntaban con insistencia el por qué de aquella traición cromática. El resto, los medios de comunicación imparciales e independientes, no se hacen esas preguntas. En esta parte del Madrid antiguo, claro; dónde todo lo que les ocurra les está bien empleado por haber votado hace 24 años a un tipo que vino con las largas puestas. Son los mimos que en ese cuarto de siglo han votao a Suárez, luego a Felipe y más tarde a Aznar, y que ahora ven con naturalidá que haya que cambiar a Zapatero. Pero en el Atleti, no. Se jodan, coño, que diría el T. Col. del 23. Y los alemanes también, que no sé que demonios hacen con la Merkel esa si votaron al fiurer en 1933...

Pero, quedaban "demócratas" en el Atleti. Entre sus aficionados. de todas las edades y condiciones, luciendo esas enseñas en verde-esperanza y oro-tesoro. Lo que empezó siendo una pelea cibernética por aquél tono o este otro, ha tomado una dimensión muy prometedora. De los puestos luce en grada de preferencia, y los que la portan ya no se les ve como un híbrido entre marciano y británico de la Premier. Por los pinganillos de la SAD les vigilan, los cuentan, se dan instrucciones en que se miren preferentemente sus equipajes... La guardia pretoriana pagada por los aficionados a los que les coartan su propia libertad de expresión, y dependiente de un servicio externo cuyos propietarios son el consejero delegado y el director de comunicación de la SAD. Como en aquél programa, todo queda en casa... O no, conociendo que don cooperador tiene también un suculento paquete accionarial en el Cádiz FC SAD, pagado al simbólico precio de a peseta por acción. ¡Qué lumbrera!. En el Atleti, le pasó lo mismo: mientras que al común de los mortales les salió la acción a 8.500 calillas, el lince de videomercury las acoquinó a 830 pesetillas. Así, hace dinero hasta un tonto.

Las bufandas pasaron y salpicaron de un color agradablemente extraño la Grada. Y se acompañaron de trapos varios que colgaban sobre los filos de los precipicios en los que mueren los anfiteatros. Desde el sempiterno y judicialmente razonado "culpables", hasta el no menos antológico "justicia para el Atleti", la reivinciación de "quiero elegir a mi presidente", el dominó de folios que expresaban un elocuente "por el cambio" o un "1903-1987" en verde y dorado, como recuerdo de que, tomando la primera frase de cualquier precioso cuento, "había una vez un Club..."

Contra los de Chamartín, por inercia histórica, y de un tiempo a esta parte contra los sevillistas, por alarmante pérdida de músculo deportivo; se anima más que se protesta. Aún en situaciones críticas. Los cánticos contra la directiva no elegida por sus socios intentaron brotar de focos muy puntuales, casi singulares. El único un poco fuerte que intentó levantarse desde los sótanos del Córner de Pantic -a  raíz del primer gol de Atleti- fué rápidamente sofocados por la algarabía y el alborozo. No es preocupante, de momento. Los que se preocupan son otros. Y gran parte de culpa la tiene esa epidemia de verde y oro que comienza a tomar uno por uno los cuerpos de gentes del Atleti a los que la memoria ancestral o el mosqueo añejo les hacen gastarse cinco o diez pavetes con sumo gusto en una prenda que no tiene nada que ver con sus Colores. Los que llevan en el corazón.
La SAD sigue ganando al Club. Pero ya no es por goleada. Aquél fichaje de enero en verde y oro, nos acabará dando el empate. Y de ahí, a la victoria. Como se cantaba hace un tiempo. "se va a acabar, se va a acabar, la dictadura...gil y tal"

Compradla, regalarla, hablar de ella, enseñar su significado, llevadla en la bandeja trasera del coche hasta el próximo partido... Contribuyamos a hacerla un símbolo sencillo, económico e inequívoco: el Club, para sus aficionados. Los dueños, para fincas o cotos de caza. Aquí necesitamos y queremos buenos gestores elegidos en mayoría por su masa social.