“Le haré una oferta que no podrá rechazar”. Es una de las frases más célebres de la historia del cine, para ser exactos, de la historia del cine negro. El autor de la susodicha, era el protagonista de la novela de Mario Puzo “El Padrino”, Don Vito Corleone. El tal Padrino, no era precisamente como José Luis López Vázquez en “La familia y uno más”, repartiendo regalos y buscando a Chencho por la plaza Mayor, sino alguien bastante menos afable.
Aunque seguramente sobre la explicación, pues el libro fue llevado al cine y la sinopsis la conoce casi todo el mundo, no estará de más recordarlo con dos párrafos y aprovechar de paso para rendir homenaje a esta obra que en su día me maravilló: “Los italianos piensan que el mundo es tan duro que hace falta tener dos padres, por eso todos tienen un padrino”: Don Vito, es el cabeza de la familia mafiosa Corleone, la organización criminal más poderosa de la ciudad de Nueva York durante la década de los años 40. La historia relata como este inmigrante italiano se convierte en un despiadado jefe de la mafia, con su propio código de honor, donde estas perlas de la dialéctica encuentran su hueco. Así, esta de “la oferta”, no significaba ni más ni menos que “hablando y razonando” como él decía, conseguir sus propósitos. Dicho de esa manera, hasta suena elegante y diplomático, pero la traducción a su “razonamiento” no era más que una proposición plenamente interesada que podía llegar hasta el chantaje y con la que se ponía de manifiesto que: por las buenas… o por las malas, se haría su voluntad.
Don Vito, era un personaje orondo interpretado magistralmente por Marlon Brando. Su apariencia, encarnaría a la perfección, si se hubiera hecho un remake de la saga “made in spain”, con la de ese otro gordo cuyas tramas se arraigaban por la zona de Marbella. De la película, podría hasta encajar que, al envejecer, deja el liderato a su hijo más pequeño, Michael, y a su muerte, este asciende a Don de la familia.
Hecha la introducción, y a colación de mi primer comentario, me pregunto: ¿Qué oferta, proposición, propuesta o argumento, daría el prescrito Michael Ángel-caído, para que un bufete del renombre de Cremades & Calvo Sotelo, rectificara el informe de cientos de páginas?. Informe con datos sacados del propio Atlético de Madrid e informaciones de periódicos, que llevaba haciendo durante meses, y que había visto la luz hacía sólo un par de semanas. Porque supongo, que cuando alguien firma este tipo de documentos y tiene un hueco prestigioso en el mundo de la abogacía, no se lo encarga al primer becario del gabinete, ni lo supervisa la señora de la limpieza, con todos mis respetos a ambos, ¿no?.
Parto de la base que, la gente de Señales de Humo, conociendo a los personajes en cuestión que mandan en el Atleti y los años de experiencias acumuladas, de entrada, se anduvieran con pies de plomo en todos sus movimientos, pues sabemos que esta asociación es escrutada con lupa, escrutada o “escrotada”, que también hay periodicuchos encantados de poder tocar la bolsa testicular, (por no decir, los cojones, directamente), a la primera oportunidad que atisben tener. Y cualquier cosilla vale de excusa para que el aparato mediático del cluz lo utilice en su contra, (qué te digo yo, a modo de ejemplo reciente, que un tipo anónimo le pega a otro tío afín al clan del Gilifato, pues entonces resulta que podría ser culpa de los “violentos” foros, y la oposición, y demás, y lo denuncian a bombo y platillo). Por ello, deseando hacer las cosas perfectas, inmaculadas y sin dar pie a la más mínima sospecha de falsedad, mandó realizar este informe a alguien externo, llegando a un acuerdo con este bufete de abogados, para: por un lado, garantizarse precisamente esa presunción de objetividad, y por el otro, que fuera lo suficientemente importante como para ser tenido en consideración. Como decía Michael.- “Dinero y amistad... agua y aceite”.
De esto me surge la segunda consulta y bastante más grave: ¿Desde cuando, en un estado de derecho como este, (en el cual, de puro “garantismo”, a veces los delincuentes parecen tener más derechos que los ciudadanos de a pié), tu abogado se reúne con la parte contraria a tus espaldas y sin informarte?. Suena, raro, raro, pero raro, raro. Y parece que Vito sí lo tenía claro cuando le decía a su hijo Sonny.-“Un abogado con su maleta puede robar más que cien hombres armados”
Y si ya la segunda cuestión me pone de mala leche, que deciros de la tercera: ¿Qué clase de abogados son esos que además de juntarse con el oponente, sacan una declaración pública retractándose de lo dicho, o parte de lo dicho, y en la misma culpan a la persona con la cual tenía el acuerdo, o sea, a su cliente?. Que a colación de esta, o sea, de la tercera, del Padrino III, me dejo esta otra cita de Michael a Vince.- “No necesito matones, necesito más abogados”, pues nada hombre, ahí los tienes.
En su momento se me quedaron los ojos como platos, para luego hervirme la sangre ante tamaña felonía. ¿Pero en qué clase de sociedad vivimos?. ¿Esto es un estado de derecho o una república bananera con caciques y dictadores que manejan a su santa voluntad los mecanismos estatales?. ¿Cómo se puede permitir semejante tropelía?. ¿Qué poder tienen semejantes prescritos como para hacer que el código deontológico y la relación abogado-cliente salte por los aires de esa manera?. ¿Hay alguien, aparte de la famigília o el cooperador necesario Cerezo, más poderoso detrás de todo esto?. ¿Se les meterá una demanda ante el colegio de abogados?.
Yo realmente no tengo idea de lo que ha pasado, pero si en este país, insisto, en aras de ese “sagrado vínculo”, se ha permitido que hasta gentuza como los que mataron y escondieron el cuerpo de Marta del Castillo, hayan mentido en sus declaraciones “aconsejados” por sus abogados, para salvar el cuello de una forma tan vil, porque el Derecho les asiste y así pueden hacerlo… ¿Qué es eso de traicionar a tu cliente y clavarle una puñalada trapera para dejar su prestigio y trabajo, ganado durante años, a los pies de los caballos?. Caballos o jamelgos que, dicho sea de paso, están deseando encontrar el momento de pasarlos, o pasarnos (y me incluyo, porque todos, como atléticos de corazón, somos o deberíamos ser Señales en este caso) por encima y saldar así favores o rendir pleitesía “Algún día, y ese día puede que no llegue, acudiré a ti y tendrás que servirme. Pero hasta entonces, amigo, acepta mi ayuda en recuerdo de la boda de mi hija”.
Está claro que Michael Ángel-caído, conocido en el mundillo con el sobrenombre de Caratorcida, (por su aspecto desfigurado de serie, no porque, al igual que al personaje de la película, la tuviera deformada a causa del puñetazo propinado por un policía), podría haber diseñado un maquiavélico plan, trazando alguna sucia jugada para hacerle la envolvente a dicho bufete. Pues sino, dicho con todo el cariño a los responsables de la elección, creo que, o se la han jugado con el nombre, o se han hecho un lío al buscarlos en el Google por oídas, encontrando a estos otros psudo-picapleitos del tres al cuarto en lugar de los originales y auténticos del respetuoso despacho de abogados. O sea, que pareciéndose solamente en el nombre, me inclino a pensar que su nomenclatura real era la de: Cremades-párragos. Que no es más que eso, un plato bajo en calorías que como su propio nombre indica, está hecho con esos vegetales, y de derecho saben, lo que sabe un espárrago. Lo que ya no llego a distinguir es si son espárragos “trileros” o “blancos” que también son muy afines a los culpables y por ende, dañinos para el estómago rojiblanco. Pero bueno, igual podría haber sido un sufflé de los mismos, sólo que para esta receta, se añaden, cuecen y trocean unos huevos, y se calienta todo en el horno (en este caso, los huevos nos los han querido cortar pero bien, y más que calentarnos, nos han metido un recalentón). Ahora que, si de espárragos va la denominación del despacho, puestos a elegir recetas, la que tras la deslealtad les vendría que ni pintada a estos pollos, sería la de la fritura, concretamente: mandarles a “freír espárragos”.
Respecto al otro socio de este “tufete” (que diría el amigo José Luis), evidentemente sería el de “Calvos Otelo”. Ahí, como todo el mundo sabe, lo del “Calvo”, salvo el de la lotería, en el argot coloquial, responde, siguiendo con este esperpento de representación, a bajarse los pantalones para enseñar las posaderas, que no las vergüenzas, pues a tenor de lo visto, no parecen tenerlas, quedando el interfecto, con el culo al aire. Y respecto a la segunda parte contratante de la marca contratante del nombre: “Otelo”, para no alargarme mucho más, sólo comentaré que es una creación de Shakespeare, una tragedia, en la que un personaje mezquino llamado Yago, con mentiras y tretas hacia todos, engaña a Otelo hasta tal punto que le hace estrangular a su propia esposa. Así, si alguien quería ver la obra, lamento haberle estropeado el final en este resumen resumidísimo sonrojo de cualquier de crítico teatral. Eso sí, para dejaros algo de intriga, ya los papeles de Otelo, Yago y Desdémona, que se los asigne cada cual a los de C&CO, MAG y SdH, que son los hipotéticos de este escrito. La única duda que me asiste es si en vez de Otelo, que rima con tomadura de pelo, no sería Otilio… chapuzas a domicilio, personaje de comic y ficción que al igual que los Mortadelo, Rompetechos y demás fauna, hacen de este caso, por lo alucinante de él, un tema más del 13 Rue del Percebe que de la realidad. “Cremadespárragos & Calvos Otelo” leguleyos que te toman el pelo.
Porque esto, con todo lo serio que debería ser y que evidentemente no lo es o al menos, no lo parece, es un absoluto disparate. Díganme sino, ¿Quién en su sano juicio y si no hay explicaciones que convenzan de lo contrario, podría pedir consejo o contratar ahora a esta gente, sabiendo que pueden venderte a la parte que demandas o te ha demandado?. Para mí, es una mancha en su carrera que ríanse de la que dejaba el Prestige.
Algunos piensan que dicho mazazo mediático hace mucho daño a la causa. Mi opinión no es tan tajante, tal vez soy y tengo una visión optimista, pero creo que es una buena oportunidad para conseguir mucho con tamaña traición. La gente se suele revelar contra las injusticias y los que realmente, a estas alturas, no creen en nosotros, prácticamente nada les va a hacer cambiar de opinión, pero, los que estamos a este lado, o los que duden o no se han posicionado de forma activa, si se les explica bien, no pueden quedarse de perfil ante tamaño atropello e indefensión, por lo que el cabreo contra quienes manejan los hilos de este club así, debería de ser una espoleta que nos hiciese unirnos más, ser más fuertes y creer aún con mayor convencimiento en la causa.
Ya ha pasado una semana, y los acontecimientos se han producido con tal celeridad, que mientras el clan y sus acólitos aireaban con el mayor de los bullicios el error del informe (tal vez de forma, que no de fondo), la justicia, lenta pero segura, hacía que el cabreo con el tema de los abogados quedara en un segundo plano ante el impulso y el cariz que tomaban las hechos con la publicación de la sentencia de la ampliación de capital, transformando el mosqueo, en alegría a raudales entre los mayoritarios.
La misma no es muy larga, pero tiene tres palabras que no dejan maniobrabilidad a los negociantes de la comunicación que siguen plegando el diccionario para decir sin decir y contar sin contar. Así, aunque Don Vito, en el libro, ponía las rotativas al servicio de su vástago para minimizar y hasta justificar el asesinato que Michael había cometido con un jefe de policía. Ahora, fuera del mundo de Mario Puzo, los tabloides (salvo que estén comprados) deberían de explicar a sus lectores qué significa eso de que los Gil y Cerezo (que no el Atlético de Madrid) han cometido un: FRAUDE DE LEY. De hecho, me encantaría ver a los que se han hinchado a decir que sí, que el Tribunal Supremo dictaminó lo de apropiación indebida (evidente e irrefutable, aunque no suficientemente contado por los mismos)… pero que prescribió y claro, la ley ya no les afecta y que hay que mirar al frente (sí, sí, que miren al Frente y verán lo que les van a decir)… Pues vale, ¿queréis estar dentro de la ley?, pues a ver cómo ahora, tanto el de las “gateras”, como el que pedía “pruebas”, cómo tantos y tantos come puerros, van a actuar con unos tipos que han vuelto a delinquir, con la sentencia más caliente que la crema de espárragos recién salida de la cazuela. Porque… ¿seguirán con la misma hipocresía y cinismo? ¿Serán tan ciegos como para no darle la trascendencia que merece?, no lo sé, pero miopes sí, como De Gea y su operación, que fue dada con mayor espacio, relevancia y prioridad que la noticia de la sentencia… y eso el día de autos, que posteriormente, ya me contarán ustedes.
Abro paréntesis para introducir esta supuesta y fantasiosa conversación entre el jefe del clan y su heredero, un día cualquiera al principio de la película y sus consecuencias posteriores:
Calam.- Papá, ¿por qué somos del Atleti?.
Gordo.- Porque lo hemos robado
Calam.- ¿Pero nosotros no éramos del Atlétic?
Gordo.- Sí, pero a ese no dejan hacerlo SAD y de allí nos largarían a chapelazos como intentáramos la más mínima.
Calam.- ¿Y lo trincamos así, sin que pase nada?
Gordo.- ¿Pero tú eres tonto o qué?. Nos apoyamos en el cine; le daremos un lavado de imagen, un doblaje, unos decorados, unos efectos especiales, un todo aparente, damos una parte jugosa a la prensa, que tenga audiencia, que les demos entretenimiento y relleno de sus espacios y tal y tal. ¡Y verás como cuela!
Calam.- ¿Y necesitaremos maquillarnos y disfrazaremos con pelucas como los actores de verdad para disimular?
Gordo: Tú ya vas suficientemente disfrazado, y la peluca la pone el productor, nosotros sólo movemos los hilos, el dinero y lo reinvertimos convenientemente
Calam.- ¿Y eso es honrado?, ¿parece “El Padrino”?
Gordo.- Después de lo de San Rafael, y pensando en Marbella y Malaya, ¿tú crees que me preocupa?
Calam: ¿Y la justicia no hará nada?
Gordo: Eso se tapa, se desvía la atención, nos hacemos las víctimas y verás como prescribe y tal y tal. Y sino, me muero “Ardería en el infierno para asegurarme que mis hijos están a salvo”… y te lo dejo en herencia.
Calam.- Y entonces… ¿no podré ejercer mi carrera de veterinario?
Gordo: Sí, tranquilo, me compro un cocodrilo y le tratas la indigestión que tenga con el Tren Valencia.
Pasados muchísimos años, Calam, tras heredar el negocio al frente del Atleti, y obtener numerosos fracasos deportivos, mediocres temporadas, gastos incontrolables, desviaciones de comisiones e ingresos, ventas de terrenos, fichajes, pufos y cobros de salarios personales muy por encima lo que habría ganado en varias vidas ejerciendo de trabajador decente. Dejó un agujero que ni el de la capa de ozono, mientras que parte de sus colaboradores (representantes) le otorgaban, con la excusa de un año en el que sonó la flauta y conseguía un par de títulos, el pomposo premio al “mejor gestor”.
Así, lo que su cacareadísima carrera de veterinario (del latín, la ciencia que estudia las bestias) no le pudo dar en la vida real. Se lo ofreció este bendito club y su afición, al abrigo de unos medios comunicativos complacientes y una hinchada dormida. Pudiendo destacar realmente en la vertiente más prolífica y en la que más y mejor se sintió realizado, la de Waterinario (del latín, la ciencia que estudia las cagadas) y a la que en estos días, por fin, la justicia puede poner punto y final, dándole la excedencia forzosa por incapacidad manifiesta, amén de otras lindezas más.
“Papá, ¿por qué robamos el Atleti?”
“Hijo, porque “Toda mi vida he luchado por proteger a mi familia” y como tú eres una calamidad, si en lugar de estarte aquí viviendo del cuento, ejercieras de verdad, los de la protectora de animales te meterían en la trena. Y no olvides que “Michael, tu papá te quiere mucho”
Pasados los años, el tufete de las cagadas deportivas y de la mierda económica que el Waterinario ha provocado, puede olerse a kilómetros, y mientras algunos luchan por intentar destaparlo y recuperar este antaño brillantísimo club, otros siguen aprovechándose de él. Pues la diferencia entre ser del Atl. de Madrid SAD, y ser del Atlético de Madrid, no es simplemente el término SAD, Sinvergüenzas A Domicilio, sino que al primero le falta lo “ético”, y por esa gatera sí se cuelan muchos chupatintas, que hacen plácida la estancia por la rivera del Manzanares a los culpables. Pero del segundo, cada semana somos más los que estamos expandiendo el verde y oro. Cada vez hacemos más ruido estando más gente informada y concienciada, y el día de mañana, que está a la vuelta de la esquina, recuperaremos lo que es nuestro.
Sigamos empujando y por lo pronto, a ver si este sábado la hacemos más pletórica que contra el Villareal, animamos al equipo y disfrutando con el juego y la victoria sobre los vikingos, que por ende, es el equipo protegido por los muchos periodicuchos que nos ningunean. Dejamos ver nuestras bufandas de la esperanza dorada, pancartas varias y deleitémonos por momentos con unas pitadas y cánticos tan espectaculares contra los culpables por fraude de ley: Don cooperador “neCerezario” y el Don Michael Ángel-caído, que ya puede dejar “la Secta” el volumen como si de cine mudo se tratara, que ni por esas vayan a dejar de escucharnos y vernos en los numerosísimos lugares donde se emita el partido.
Así que: Padrino, "Cada hombre tiene su propio destino" y el tuyo está llegando a su final en esta película. Porque ninguno de los de este lado, estamos para cogerte el dorso y decirte “Bacio la mano” como tantos callistas te han hecho y hacen en señal de respeto, sino que vamos con la intención de “Vaciar la mano”, tu mano, la que lleva manejando los hilos de las marionetas y saqueando sistemáticamente al Atlético de Madrid durante tantos años junto con la Famigília y alguno más.
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"Podemos jugar mejor, ganar o perder, pero hay una idea que no se negocia, que es el trabajo y que nadie es más importante que el equipo" Cholo Simeone