Se juntan dos asesinos sicópatas con más de 20 muertes a sus espaldas... y se ponen a hablar de quién es el menos malo. Pues eso.
Que sí, que todos conocemos a los golfos, y eso no va a cambiar, pero que el angelito le gusta más el dinero que a un tonto una tiza, pues también. A Tiago también se le debía pasta de sus continuas idas y venidas, pero quiso jugar aquí y aquí está. Luego, ha querido seguir aquí y se ha bajado la ficha, y aquí está, y también ha negociado con los golfos. Y más casos hay.
Que son profesionales y tienen que mirar por su dinero, correcto, unos lo hacen más, no miran otra cosa, y otros hacen prevalecer intereses deportivos, pero éste, negocie con los golfos o con quien negocie, primero mira por el dinero de su padre, luego mira por el de su mujer, luego por el suyo y finalmente vuelve a mirar por el dinero. Ya si queda un huequito mira por lo deportivo si eso. Y no estoy entrando en la parcela deportiva, que a mí siempre me ha gustado, pero por mucho que te guste un futbolista tampoco te vas a cegar. Ni este verano se bajó la ficha lo suficiente, ni ha hecho nunca un mayor esfuerzo que saber que sin hacer nada, deambulando en Alemania, se lo llevaba crudo. Sabe que no va a volver a ganar 5 kilos limpios en su vida y está exprimiendo hasta la última gota. Que le permites ganar lo mismo o más y encima jugar la Liga española y la Champions, pues claro, te va a decir que sí, no es tonto, ahora, si para hacer eso hay que perder dinero, entonces ya casi que lo hablamos luego.