Tarraco: Chinasky: Al que no se debería juzgar, porque jugó dos minutos, pero sí bastó con esos dos minutos ver que no sabía ni donde estaba, es a Joshua.
Mira que tengo ganas de verlo. Pero sí. La sensación cuando salió al campo, era la misma que tendría yo en idéntica situación. Estaba como Duarte después de una predicción. Perdido. A ver si entra rápido en la rueda, por que tanto él como Toby, serán necesarios , y no a largo plazo.
Saludos.
Hombre, la verdad es que es un marrón del 15 y no se puede ser injusto con él. Se lesiona el capitán, la bandera, el equipo lleva 15 minutos pasándolas putas, empujados atrás, y ahí sales a debutar, un tipo además que por su constitución física y raza se le ve desde cualquier sitio. Una putada. De hecho porque el Cholo es muy de cambiar piezas, pero yo no le hubiera sacado, antes hubiera puesto a Toby, que disimula más, o a cualquier otro defensa de los convocados.
Pero al pobre se le vio que se incrusto por delante de los centrales como pudo y cuando la pelota iba para un lado, corría para ese lado, y luego para el otro, como pensando: "pero coño estaros quietos, que no sé ni donde ponerme". Marronazo que por suerte no tuvo consecuencias, porque por lo que sea le cae un balón, la caga, algo que sería hasta muy lógico, nos la clava y eso le marca. Ahora, el joputa tiene un físico imponente.
Como reflexión, he podido saber más de su pasado y características desde que lo ficharon, pues reconozco que igual que en otros casos sí conocía a los futbolistas bastante bien antes de venir, siendo aquí desconocidos, como fue el caso de Miranda. Arda, Ellias, a éste apenas le había visto, más porque en la Liga francesa jugadores como él hay unos cuantos. Joshua era un futbolista que jugaba con corte de 8, no de mediocentro, aprovechando su zancada e incorporación por banda, con mucho recorrido, y posteriormente al llegar al Saint-Étienne retrasa su posición, aprovechando su físico y es donde termina destacando y ganándose un hueco en las inferiores de Francia para dar luego el salto a la absoluta.
Pues creo que no sería mala idea que empezara a tener minutos en su antigua posición, para ir entrando en la dinámica de equipo, más desahogado de funciones tácticas (contando que el actual Aleti todo el mundo tiene obligaciones tácticas, juegue donde juegue), pero jugar de 5 o de 6 en el Aleti es muy, muy complicado, porque todo el engranaje táctico pasa por ahí, y son muchos movimientos los que hay que automatizar. Pero además su poderío físico juega en contra, porque esa función en nuestro equipo tiene una características de ancla muy importantes, es decir, Gabi, Mario, Tiago, los que viene jugando en esas posiciones, jamás suben alegremente arriba, salvo jugadas claras con relevo de interior o lateral, y casi terminan más como terceros centrales que como llegadores, y un error ahí es mortal para nosotros (de hecho gracias a que cada vez lo tienen más claro estamos evitando esas famosas contras que teníamos el año pasado de pase diagonal a los costados a un tío que viene solo en carrera).
Entrar en un equipo tan engrasado tiene una ventaja, que no hay prisas, pero tiene una gran desventaja... una mota de polvo se nota en el perfecto funcionamiento de los engranajes. Y son tantos los conceptos tácticos a adquirir, que es difícil. De hecho creo que Toby o Giménez lo tienen, dentro de la dificultad, más sencillo. Es lo que muchos ven en Oliver a veces y le critican por estar muy verde, y no es tanto una cuestión de técnica individual, estar verde o capacidad táctica, o incluso física, es más un problema de ajuste perfecto en una máquinaria en la que los encajes son milimétricos.
En otro orden táctico, y con mucha menos carga, y muy diferente, también les está pasando a Baptistao y Villa. Adrián, aunque no lo comparto, puede estar en baja forma o como quieran algunos, pero cuando entra ves que encaja en la maquinaria, porque esos movimientos los tiene asimilados, automatizados.
El árbol muchas veces no nos deja ver el bosque, y la alegría de los éxitos puede cegarnos, y aunque lo repetimos hasta la saciedad, realmente no somos conscientes de la maquinaria de movimientos tácticos que maneja este equipo, y lo más cojonudo es que la gran base de jugadores, la que se mantiene desde que llegó el Cholo, lo hacen pero tampoco son conscientes, lo hacen de manera automática. Ahí está el éxito (al margen de la creencia ciega y el infatigable trabajo).
No sólo ya nunca me aburre ir al Calderón, o ya nunca me da pereza ver un partido fuera de casa (reconozco que hace años me daba pereza verlos, creo que nos pasaba a todos), y no por los resultados, que también, es que ahora si pillo un partido en redifusión, me lo vuelvo a ver, porque sin la tensión del resultado, la armonía de los movimientos en cualquier parte del campo, la solidaridad, es alucinante y digna de estudio. Eso y las variantes. Dentro de la aleatoriedad del fútbol, de lo arbitraria que puede ser una jugada en función de un simple mal bote o de un rebote, casi todas las situaciones habituales que se dan tienen su respuesta condicionada, pero incluso hay resuestas para los imprevistos. Analizando se puede ver que dos desviaciones sobre lo habitual similares en partidos distintos se resuelven de manera similar. Es la hostia, pero hace que sea muy complicado para los nuevos.
Por lo que sé, (comentarios que me llegan de un buen amigo de nuestro portero belga), Joshua y Toby lo están flipando en colores. No han visto tanta carga de trabajo táctico en su vida.