A ver, el extra de odio a Molina o De Paul (cada uno ha hecho sus méritos propios para tener su ración, pero hablo de esa inquina adicional, la que se palpa...) viene de que son argentinos. Y por tanto, en el imaginario de una parte de la afición, enchufados de Simeone por su nacionalidad. Los pide argentinos, y los pone a jugar por ello sin merecerlo. No dejan de ser unos inmigrantes que le quitan el trabajo a nuestros canteranos -y por eso el tufillo algo racista de ciertos comentarios-. Por supuesto, nunca se comenta que el jugador al que siempre se sacrifica primero en este equipo es al muy argentino Correa, y que gente como Gaitán o Vietto (con mucho nombre ambos a su llegada) fueron despachados en cuestión de meses. Atizar a los argentinos es otra forma de cagarse en el entrenador, y por tanto no faltan atléticos dispuestos a hacerlo (de paso, se cagan otro poquito en la importancia histórica de los argentinos en nuestro club).