Vaya por delante que no he visto jugar nunca al tal Ramos, ni por supuesto tengo idea de cómo funciona la organización de categorías inferiores del Aleti.
Pero por cosas del destino si sé un poco de cómo funciona en el fútbol actual esto de los jóvenes y las llmadas canteras. Sobre la base de ello doy mi opinión, que por fuerza es superficial, o más bien tangencial.
Lo que cuenta Nacho de los padres, no sé si será verdad, pero es perfectamente creíble. Ese tipo de padres abunda en el deporte, más allá del fútbol. Suelen ser demoledores para la carrera deportiva de los hijos.
Más que creíble es el posible papel del tal López. Era un futbolista mediocre -lo dije en su día y lo sigo sosteniendo-, además de un pelota de los Gil. Eso le ha labrado su camino como agente de futbolistas, que curiosamente se reduce más bien a ser agente de futbolistas del Aleti. De él no me extrañaría nada -negativo para el Aleti-.
Y de la política de cantera, ya he dicho aquí que en España, en general, la política de cantera con los futbolistas de mayor proyección y edades superiores a los 16 está sometida a un extraño criterio de promoción militar a la antigua usanza. Si a ello se une la preferencia por incorporar foráneos dentro de una política de 'plan renove' permanente, también es perfectamente creíble que más de una pieza valiosa acabe en las vitrinas de otro coleccionista. Los casos paradigmáticos más recientes los tenemos en el Barça, con Cesc y el central que acaban de repescar del United.