C.G. Fuente - 04/08/2008 03:00
Aquel desafortunado día en el que Fernando Torres firmó como nuevo jugador del Liverpool, el Atlético de Madrid se quedó sin uno grandísimo futbolista…pero ganó un hincha a muerte. Como lo fuese antes de que tuviese el privilegio de defender la rojiblanca en primera persona, simplemente preocupado por saber que había hecho su Atleti, por hacer cuentas para saber si el equipo acabaría en Europa, por conocer a quién se ficharía… uno más. ¿Alguien lo dudaba? Algunos aficionados no llegaron a entender el adiós legítimo del 'Niño' pero por si alguien no las tiene todas consigo, sólo debe acercarse a la entrevista publicada en el último número de la revista oficial de la Liga de Campeones, para comprobar lo que siente el fuenlabreño por el equipo que le vio nacer en lo deportivo.
El madrileño se siente "uno más" entre la marea de la 'Bendita Afición', más cuando se ve reconocido por otro seguidor colchonero. "Siempre que tropiezo con algún aficionado del Atlético de Madrid en la calle me sigo sintiendo uno de ellos, y es maravilloso", explica el delantero, quien no duda en decir que si algún día regresase a la que considera su casa y no fuese recibido como un igual, sería difícil de asimilar para él: "Soy fan del Atlético y me encantaría regresar allí algún día. ¡Quizás nos enfrentemos en Liga de Campeones! Me gusta pensar que seré bien recibido. Si algún día regresara y la afición no me brindara una acogida calurosa sería muy duro para mí. Sería muy difícil asimilar algo así. Espero que no sea el caso".
Por ello, porque sigue teniendo al Atlético muy presente, tiene una escena marcada a fuego en su memoria. Es la que se produjo aquel día en el que el madrileño se encontraba en el aeropuerto para tomar un vuelo con destino a Liverpool. "Guardo algo de aquel día que dejé el Atlético para unirme al Liverpool. Fue en el aeropuerto de Madrid. Había mucha gente, muchas cámaras. Fue un momento muy emotivo, mis padres estaban tristes por vermemarchar", comienza su relato. "Y allí estaba ese anciano, a quien nadie conocía, pero que se mostró indignado y se dirigió a mí muy decepcionado: 'Es una pena que tengas que marcharte para darte cuenta del potencial que atesoras y sacar lo mejor de ti, para mostrar al mundo lo que todos nosotros ya sabemos: lo bueno que eres'", continuó el ahora jugador "red", sobre aquel día.
"Cuando eres parte de un equipo, tomas conciencia de que hay gente que te aprecia más como persona que como jugador. Esas palabras me llegaron al corazón. Ya me habían dicho cosas similares anteriormente, pero esta vez fue diferente. Ese anciano de 60 años al que no había visto antes, seguidor del Atlético toda su vida, entregado a su equipo, pero en ese momento más preocupado por mi bienestar que por cualquier otra cosa. Lo que lo hace aún más especial es que día a día me voy dando cuenta de que éstas son las cosas que poco a poco se van perdiendo en el fútbol. Siempre recordaré esas palabras", concluyó