EL ATLETI
Me equivoqué gravemente en mi último post. Quizás inspirado por un espíritu navideño que desconozco tener o empujado por el deseo de acabar de buenas un año horrible o, sencillamente, harto de pensar siempre en negativo con el maldito Atleti, os pedí que dejarais de quejaros, que os relajaseis y disfrutaseis, que, por una vez, vivierais el momento sin temer el futuro. Y entonces el futuro cayó sobre nosotros, ingenuos, como un millón de truenos. Cuatro derrotas para empezar 2009, una imagen espantosa salvo en el simulacro de ayer, adiós a la Copa y ligeramente cortados de la zona Champions. Todo en diez días. ¿Cómo no quejarse?
Pero, ojo, no hagamos una vez más la de siempre, pedir la cabeza del entrenador hasta que nos la entreguen y luego darnos por satisfechos. A Aguirre se le está yendo el asunto de las manos. Eso es evidente en decisiones como la de seguir contando con Luis García como si aún fuera un jugador de fútbol en activo, mantener a Maniche en el once cuando rinde en función de lo que cree más conveniente para sacar la renovación que desea y no merece, pasar de 0 a 100 con Camacho sin que el chico pueda saber qué demonios esperar en cada momento, olvidar a Miguel después de empeñarse en quedárselo, no explicarles a sus defensas cómo frenar a Llorente ni que cuando Messi agarra un balón siempre tiene que ir un central a la ayuda del lateral (si el lateral es Mariano ya ni os cuento), guardar a Kun cuando la eliminatoria está viva y exponerle cuando está muerta, empeorar al equipo con cada cambio y no darle los galones a Banega para ver si jugando un poco al fútbol la cosa mejora.
Una larga lista, sí, pero os planteo un sencillo juego. ¿Cómo mejoraría más ahora mismo el Atleti con un simple cambio? Cinco opciones:
A) Simeone por Aguirre
B) Xabi Alonso por Maniche
C) Monchi por Pitarch
D) Fernando Roig por Gil Marín & Cerezo
E) Yo por Pernía
Para mí, quitando la E (que mejoraría el equipo pero no demasiado), la B, la C y la D serían más efectivas que el cambio de entrenador. Porque Aguirre no ha sabido gestionar lo que le han dado, pero es que lo que le han dado tiene tela. Una plantilla descompensada y corta, sin lateral derecho, sin un solo extremo suplente ni un delantero grande, en la que el teórico cerebro es un descerebrado y en la que el fichaje estrella es un central que no sabe jugar de central. Así que Pitarch es más culpable, aunque él también puede decir que sacó a Ujfalusi gratis y Assunçao por cuatro perras (buenos fichajes ambos) y que intentó fichar a Diego, Silva, Lucho… pero que las negociaciones no fracasaron por su culpa, si no porque el club fue incapaz de darle dinero para acometer un fichaje vital, pese a los ingresos de la Champions y las desproporcionada subida en los abonos. Y los dueños, ¿qué pueden alegar en su defensa? Nada. Porque la mala gestión es lo que ha conducido a esto y basta ya de presentar la intervención judicial como excusa. Primero, porque han pasado siglos; segundo, porque su historial legal garantiza que algo habrían hecho. Sencillamente no han sabido explotar comercialmente el club ni elegir al director deportivo que, a falta de dinero, sacara oro de las piedras ni al entrenador que supiera explotar cada recurso existente e inventarse algún otro.
Sí, me equivoqué. Teníais todos los motivos del mundo para quejaros, para gritar, para exigir responsabilidades. Pero no os contentéis con rascar la superficie. No os deis por satisfechos cuando Aguirre firme el finiquito. Eso sería tratar los síntomas y permitir que la enfermedad siga destrozando a sus anchas. No matemos siempre al mensajero, por malo que sea.
Mientras lo resaltado en rojo no lo tengamos claro todos, no habremos detectado el problema, y sin detectar es dificil solucionarlo.