Recibo ayer en mi domicilio la carta del delincuente Magil, veterinario y consejero delegado de la SAD, en la que me indica que debo desembolsar el último 25% sobre la ampliación de capital que de manera perniciosa urdieron hace unos años.Con toda su caradura me insta a que desembolse el anterior 25% que venció en diciembre de 2008, y eso si antes del 10 de mayo. De no hacerlo se reserva el derecho de emprender las medidas legales que marca el art X de la Ley de Sociedades Anónimas, bla, bla, bla.
El domingo reclamaré tanto fuera como dentro del campo el latrocinio que llevais cometiendo durante más de 20 años, tú, tu familia y el cooperador de la estafa que perpetrasteis en el año 1992. En aquella ocasión yo si desembolsé las cinco acciones que suscribí, con dinero contante y sonante en total unas 50.000 ptas y el finado se las trasfirió posteriormente a su cuenta, no revirtieron en el Club.(Hechos probados)
¿Como podemos el resto de accionistas saber de manera fehaciente que estos rufianes han desembolsado la parte que les corresponde?.