Hay unos cuantos periodistas como este Borrell, que son muy criticos con los mafiosos de la S.A.D. Ya es hora, pero vamos a ver lo que duran con estos mensajes.
Me gusta en particular, que empezando por la critica a la catastrófica gestión deportiva y financiera de los delincuentes, acaban algunas veces en los orígenes de la tragedia: la estafa, apropiación indebida y falsedad documental con la que la familia Gil se apropió del Atleti.
Muchos de nosotros empezamos por donde ellos acaban, pero a mi me gratifica que haciendo el camino al revés, gente joven como este, te acaben dando la razón.
Corroboran una linea: no hace falta remontarse al pasado para ver a los delincuentes, por que siguen siéndolo, y se les sigue viendo el plumero. En la critica de los hechos presentes, la lógica les lleva al pasado. Menos a los periodistas comprados, como el Bizconde, Tontolete, el Díaz ese, y animales venenosos de similar hechura.
Saludos
El fútbol es un sentimiento que se lleva muy adentro...y se concreta en el Atlético de Madrid.