Este es otro caso más, claro e irrefutable, de la opacidad manifiesta en estos asuntos de nuestra directiva. Se me ocurren muchas cosas al respecto, pero es que por muchas vueltas que le des, es la historia de siempre, iniciada con el episodio famoso de los fichajes simulados cuando se apropiaron del club y decidieron que sería el marco perfecto para vivir el resto de sus días a base de estafar y robar a quien se pusiera a tiro.
Y efectivamente, los periodistas para estas cosas nada, sólo les interesa el deporte, no los asuntos institucionales, pero claro, sólo para este tema.
Y los aficionados, seamos sinceros, tan felices, ¿qué más le da a muchos?