Bacharach: Pues es bien fácil. Lo que haces es establecer la premisa dependiendo de la conclusión. Lo que haces es abrazar una falacia. Si el que a un equipo le vaya mejor como SAD que como club de socios significa el éxito del modelo de gestión profesional, el que le vaya peor habrá de significar necesariamente su fracaso. Pero tú, trilero al que siempre se le ve el garbanzo, te lo saltas y te pones a hablar de otra cosa, ese atajo de la meritocracia, con el que te saltas una lógica para abrazar otra a mitad de enunciado: si un equipo utiliza una gestión profesional y triunfa eso significa el éxito del modelo, y si el mismo equipo utiliza una gestión profesional y se hunde, milagro, eso también significa el éxito del modelo. Y así el "éxito del modelo" pasa de conclusión a premisa. Un método argumentativo que se ve mucho en jardines de infancia y McDonalds los sábados por la tarde.
Está visto que no te has enterado de nada.
Te voy a poner un símil, a ver si ahora te enteras de algo: el sistema de asignación de puestos de trabajo públicos por el método de oposición, que es un sistema meritocrático.
Si tú te preparas una oposición y te la sacas, es bueno, y si no te la sacas, TAMBIÉN, porque o no te la has preparado lo suficientemente o ha habido otro que se la ha preparado mejor que tú y por lo tanto merece más el puesto (meritocracia).
Según tu teoría, esto de la meritocracia de la oposición es una falacia: si te preparas una oposición y te la sacas el sistema es bueno, pero si finalmente no te la acabas sacando, implica que el sistema ha fracasado. Pues no: si no te la has sacado es porque no te lo has preparado lo suficientemente (no tienes una gestión profesionalizada o los profesionales que tienes no son lo suficientemente competentes) o porque otro se la ha preparado mejor (mejor gestión profesional).
Por eso los opositores suelen saber más de los temas que los políticos: porque a diferencia de éstos primero están preparados en los temas que son de su incumbencia y segundo son profesionales de lo suyo, frente a los políticos que simplemente están ahí por haber sido votados sin ningún mérito más, que lo mismo hoy soy ministro de Sanidad, mañana de Educación y pasado de Defensa (ZP y algunos de sus ministros serían un buen ejemplo, y hasta aquí puedo leer, que no quiero entrar en política que no viene a cuento).
Por eso se dice que el sistema democrático es un sistema de gestión POLÍTICA, no ECONÓMICA, y por eso en las economías democráticas modernas la provisión de bienes y servicios que cubren las necesidades de los demandantes se vertebran en torno a la figura de la EMPRESA, porque en esta rigen unos criterios (eficiencia económica, etc.) que son distintos a los que han de regir la vida política (respeto a las libertades individuales, derechos humanos, etc.) que van mas allá de la mera eficiencia económica.
El modelo meritocrático de las SAD's es positivo por justo, porque permite la gestión profesional (que obviamente no se puede dar en un modelo en el que los que toman decisiones son aficionados por muy elegidos que sean por los socios), y también porque si no lo haces viene otro (el Sevilla o Villarreal de turno) que te gana la tostada y te vas al hoyo. Y sí, ESO ES BUENO, obviamente no para el que se val al hoyo, sino PARA EL CONJUNTO de la sociedad: permite que otro que lo ha hecho mejor te quite el puesto. Como en la oposición.
Con el modelo de clubes de socios el Atleti era el tercer club de España con el Marqués de la Florida, con Galíndez y con don Vicente, o con Cabeza y con Gil. Da igual quién estuviera en la Junta Directiva, como no había movilidad meritocrática (que parece que te da alergia) estábamos siempre entre los 3 (con unos ganábamos más títulos, con otros menos). Nuestro querido Atleti ha sido casi siempre una casa de pvtas desde el punto de vista de las directivas que hemos tenido (se salvan don Vicente y pocos más), pero siempre estaba ahí arriba.
Con el Trampa$$, tres cuartos de lo mismo: siempre estará ahí esté quien esté en la poltrona blanca, ya sea Bernabeu, Mendoza, Lorenzo Sanz, Floripondio o el Abuelo Monster (dependiendo de la "calidad" relativa de los gestores ganarán más títulos). Así, se puede dar la paradoja de que bajo el mandato del impresentable de Lorenzo Sanz haya ganado más Copas de Europa que bajo el del Ser Superior. O que el impresentable del Abuelo Monster haya contado sus dos temporadas completas al frente del Trampa$$ por títulos de Liga mientras el Ser Superior en tres años gastando el pastizal que se ha gastado ha ganado menos títulos que el Atleti SAD de Calam, que ya es decir.
E ídem con el Barça: da igual que el presidente sea un buen gestor como a mi juicio era Laporta (que ha construido posiblemente el mejor equipo de la historia) o Núñez, o un cantamañanas como Gaspart, el Barça también estará ahí. Siempre.
Eso no ocurre en otros países como los anglosajones, en los que la disciplina del Sport Management está bastante más avanzada que en el resto de países desarrollados, especialmente en USA, y en donde el modelo de clubes de socios hace bastante tiempo que ha sido superado: dónde está el Leeds Utd. ahora y dónde estaba en los 70 (muy recomendable la película "The Damned United", muy gráficos los comentarios), dónde estaba el Nottingham Forest en los 80 y dónde está ahora, dónde estaba el Manchester United a mediados de los 70 o los 25 años que se tiró sin ganar la Liga, dónde estaba el Liverpool a principios de los 60 y dónde estuvo en los 80 y los más de 20 años que lleva sin ganar la Premier, dónde estaban el Chelsea o el Manchester City antes y dónde están ahora. Eso, a pesar del efecto Champions que ha producido que el equilibrio competitivo, como bien ha apuntado Madder en su momento, haya salido perjudicado en los últimos años.
Así que de falacia argumental nada.
Saludos en rojo y blanco.