LeTekro:
Ujfalusi sí sabía dónde ir. Pero muy bien lo sabía. Es un listo el checo este... Dejó montones de veces toda la banda para Raúl García, que a veces tenía dos contrarios, el lateral y capitán además de único futbolista del Rosenborg, y el que le doblase. Cuando miraba atrás, veía a Ujfalusi metido en el área. Y luego decimos que mal el navarro en defensa... Nos ha jodido mayo. No es una disculpa de García, es una crítica al checo, que físicamente está muy mermado y se esconde obligando al compañero.
De las múltiples e injustas lecturas que habéis hecho del partido de Raúl García, ésta es la que más se aproxima a la realidad, si bien le sacudes a Ujfa, de manera un tanto injusta, en lo de "listo", en el resto no te falta razón.
A mí Raúl García me parece que ha hecho un gran partido en prácticamente todas las facetas del juego, pero bueno, debo ver un fútbol muy distinto. ¿Que ha defendido mal? Estáis juzgándole como si hubiera jugado de lateral derecho y no, ayer jugó de volante. Defendió más ayer Raúl que Reyes en toda su carrera. El problema es que era el que recuperaba en el centro en muchas ocasiones, al menos el que más presionaba junto a Assuncao, colgaba la mayoría de los balones, acudía al remate y aún así, era el primero en llegar a defender, evidentemente en muchas ocasiones, después de la paliza llegaba un tanto descolocado, pero es que llegaba como lateral, porque Ujfa se incrustaba al centro sabedor de que Perea y Dominguez eran incapaces de hacerse ellos solos con las torres noruegas. Si hubiera jugado de lateral, estaría de acuerdo, hubiera sido un partido horroroso, pero es que no jugaba de lateral, que de lateral jugaba otro, y él ha jugado de mediocentro, de volante, de interior, de lateral y hasta de delantero centro en ocasiones. Para mí, el mejor del equipo de muy largo. Que se le han ido en tres o cuatro ocasiones en banda, normal, uno, él se encargaba de al ayuda, de la ayuda, no de la labor defensiva pura, y dos, con la paliza que se ha dado, demasiado bien llegaba.
Mario, y el otro día le critiqué, ha hecho unos minutos magníficos y sí ha contribuido al juego. Que no ha puesto cuatro pases de gol, evidente, pero ha equilibrado lo que parecia el caos más absoluto, ha templado cuando había que hacerlo y ha sido el único que ha intentado mantener el balón y el orden en esos momentos de absoluta anarquía, además lo ha hecho bien. Cuando hay que dar se da, pero cuando se hacen bien las cosas también hay que reconocerlo.
Del resto, entre lamentable y penoso en la segunda parte. La primera no me ha parecido tan mal como apuntais todos. Sin ser buena, ha sido correcta. El Rosenborg llevaba años sin perder en su campo en competición europea y es muy difícil hacerles gol en su campo, pese a que parezca raro porque son una banda atrás. Además es el tipo de equipo que fuera de casa nos viene fatal. Fútbol directo, por arriba, con regate seco y aperturas por banda. Nuestra pésima defensa con equipos así parece nefasta porque sacan a relucir todos nuestros mayores defectos, que son muchos.
Victoria muy importante y muy difícil a priori. El fútbol actualmente es esto, ya nadie llega y gana un partido con el escudo y menos en campos así y contra un equipo que se jugaba todas sus pocas opciones. Que la segunda parte ha sido un desastre es evidente, pero yo no calificaria el partido de manera tan lamentable a como lo hacéis. Que nos podían haber clavado 4, seguro. Pero en Villarreal también pudimos y debimos haber sacado mucho más y no lo hicimos. Así es esto de la pelotita. Llamadme resultadista, pero yo estoy contento con el partido de ayer, al menos con el resultado de ayer y el resto me da un poco igual. Los partidos como el de ayer primero se ganan y luego ya podemos discutir de lo humano y de lo divino, que si fuera de juego, que si lamentable segunda parte, pero se ganó, el resto, para el partido de ayer, me sobra. Me parece mucho más lamentable el empate en el Calderón con los alemanes, que era el partido que había que haber ganado y en el que en ningún momento se vio que se pudiera ganar. Ayer se pudo perder y tal vez se mereció perder, pero también se veía que se podía ganar.