Cuando un portero se la traga, es su fallo, por que está para parar; cuando Perea se lía, le ponemos a parir y es un tronco y un atleta; luego cuando un tio que mete los goles (y es su cualidad, a años luz de cualquier otra, ensalzada por activa y por pasiva), falla tres de escándalo, y el equipo empata, es que el equipo se ha portado y la culpa de no ganar es de Falcao.
A veces juzgamos las cosas por aplicación de teorías generalistas y olvidamos lo concreto.
Ayer Falcao estuvo de pena, por que no metió dentro la pelota, que es lo que se le pide, lo que se supone que sabe y lo que le justifica, por que es su gloria según todos. Ya está.
Y luego, que si los centrocampistas deberían meter más goles, que si deberían jugar más de espaldas, que si el equipo no estaba fresco,..... y todo es cierto, desde luego, pero si ayer Falcao mete alguna de las que tenía la obligación de meter, partido ganado, y ahora estaríamos hablando de que estamos ya en Champions y Simeone es Dios.
Lo último: que Falcao haga aquello que se espera y le justifica, y los demás que sigan cumpliendo con su deber.
Un saludo
El fútbol es un sentimiento que se lleva muy adentro...y se concreta en el Atlético de Madrid.