Lo que eramos a las 19:00 es lo que somos a las 21:00.
Este equipo sin intensidad no es nada, su fortaleza es jugar con el cuchillo entre los dientes, y disputar cada balón como si fuera el último, y hoy no era el día para hacerlo. A partir de ahí, esperar a Arda, Adrián, y la finalización del colombiano. Es lo que tenemos y con esas armas y una gran fortaleza física fuimos capaces de ganar dos finales.
¿Por qué no el viernes? Es posible, hace falta suerte, por supuesto, y la vamos a tener.