Caldera, caldero, Calderón, Vicente. En nuestro campo no vamos a permitir que nadie venga a reírse de nosotros, ni el trencilla de turno, ni el niño de las bicicletas. Porque no seremos 12, seremos 13, porque este día el tercer anfiteatro va a empujar como si un huracán bajara de los cielos para poner cada cosa en su sitio, para reparar el daño ocasionado, porque la Champions nos debe tanto, porque yo confío en la justicia poética. Porque me han contado que Pablo ha abierto una de sus puertas mágicas en el Ministerio del Cielo y ya están Luis Aragonés, el propio Pablo, Arteche y cía empujando, y cómo empujan, cómo empujan. Porque el envite del miércoles, no es el partido del año, es el partido que debe marcar un antes y un después en la historia de este equipo, en la historia del Cholo, en nuestra historia. Porque la expulsión injusta de Fernando no es más que un motivo más para espolear a ese grupo de hombres que a golpe de latido se fajan, partido a partido en el campo por amor a unos colores. Porque el Sagrado Templo debe ser, como otras tantas noches, inexpugnable. Querido Pizo, queridos hermanos y hermanas, preparen sus stencils, comiencen a cortar papelitos por cada latido, afinen sus gargantas y fortalezcan el corazón. El momento es es hoy, es ahora, es con nosotros. José Luis, Chinasky, Jesusez, Chema y cía... Activemos una de esas campañas que desde SdH hemos activado, hagamos colecta, definamos un plan, el miércoles 13 el Calderón tiene que ser una fortaleza inexpugnable, una eclosión rojiblanca, vamos a ello, vamos a por ellos.
Partido a partido, final a final, latido a latido y a ganar y ganar y ganar... y volver a ganar y ganar y ganar.
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@nachomontoto