Confieso que me acabo de saltar el partido a partido y he visto un video de goles de Diego Costa con el Chelshit (los había evitado por aquello de la nostalgia improductiva). Luego pasará lo que pase, pero es difícil imaginar un fichaje que nos pueda encajar tan bien: bajar o correr balones largos, dar salida al equipo con arrancadas, recuperar podería aéreo, ganar enteros en carácter. Y por supuesto, generar un odio irrefrenable entre prensa y aficionados rivales.
Cuando un tipo así está empeñado en jugar con nosotros, aún a Costa de quedarse medio año parado -en puertas de un mudial, que se dice pronto- ¿quién teme a que se vaya este o aquel? Si en vez de uno tenemos a dos de ese perfil (Vitolo), que se suman a un grupo ya de por sí fuerte... yo encaro el 2018 con mucha ilusión. Nos falta redondear el 2017 ganado en Cuernellá y luego a esperar todo lo bueno que viene.