¡Ya era hora!
CAMPEONES DEL MUNDO.
Me acuerdo del chasco del mundial 82, de la final de la Eurocopa en Paris, de la mala suerte en los penalties en cuartos en el 86, cuando habíamos sido la mejor selección hasta ese momento; del hostiazo de Tassoti a Luis Enrique en el 94, del atracazo de Inglaterra en la Eurocopa en el 96, del ridículo de Francia 98 y sobre todo del robo a mano armada de Corea en 2002.
Por fin somos campeones. Pero lo somos a pesar de Vicente del Bosque.
Tenemos el mejor equipo del mundo a pesar de que 3 de los mejores jugadores se han comido el banquillo. Cesc, Silva y Torres, son titulares en el 95% de los equipos del mundo. Busquets, Xavi Alonso y Pedro, no lo creo. Es un insulto para el fútbol que al menos dos de estos tres no hayan titulares siempre.
El sistema no es el de la Eurocopa, por mucho que juren y perjuren los periodistas. En este sistema, hay dos medios de contención y en el de Luis había uno. El trabajo de Busquets y Xavi Alonso lo hacía Senna. En la eurocopa en semifinales y en la final, jugamos con 5 centrocampistas, pero sólo uno de contención. Y teníamos a Xavi, Cesc, Silva e Iniesta a 10 metros del área rival permanentemente. Ahora tenemos el balón, pero en le línea medular y cuando le llega a Iniesta sólo tiene a Villa por delante. El resto del equipo está por detrás del balón. En la Eurocopa tenía cuatro opciones de pase. Ahora sólo tiene una opción.
Navas no le llega a Silva ni a la suela. Y menos en la final de un mundial.
Torres no ha estado fino, pero con este sistema, el único punta no la huele, porque no le llega ni un balón. Fijaos en los tres partidos que Villa ha jugado solo en punta: Suiza, Alemania y Holanda. Practicamente no ha tirado a puerta.
CAMPEONES, EN CUALQUIER CASO.