chele: Nacho: Hoy es un magnífico día para reivindicar a Don Fernando Torres #el9delaroja. El ascendente de Fernando y el temor y respeto que infunde en los rivales es algo que jamás tendrán ni Negredo, ni Soldado, ni Llorente ni ningún delantero español en la actualidad. El problema de Fernando es haber nacido en España y ser rojiblanco.
Un +1 de esos, caballero. Ver a Negredo con el número 9 de la selección es un insulto al fútbol.
Un defensor, sea de donde sea (ya no te cuento si es finés) si tiene a Torres delante le guarda unos metros de respeto. Pero eso el marqués no lo quiere saber. Al palangana ni al centrocampista que juega de delantero, ninguno.
Es lo que hay. Salvo la final de la Euro en la que España jugó un partido excelso, estamos asistiendo al derrumbamiento de lo que pudo ser el mejor equipo nacional de todos los tiempos.
Yo voy más allá. No llevas a Torres porque la central mediática te dice que no está para jugar con la selección, miramos los números y aceptamos pulpo.
Ok, por ese criterio, llévate al 9 español más en forma en la actualidad que es Michu, que además de gol, te da juego de primer toque y remate de cabeza. Y llévate al mejor lateral derecho español en la actualidad y que se ha hecho con la titularidad en el Chelsea.
Y luego, coño que eres entrenador, que se supone que sabes de esto. Te están jugando con 10 tíos defendiendo en el borde de su área, ahí no pintan nada 4 defensas y 3 medias puntas con tendencia a jugar por el centro. Es que si me apuras ni Villa.
Y luego está el tema físico, están fundidos todos.
Yo ví el partido de Francia y como no ganemos a ese equipo es para darnos collejas. Georgia pudo meterle fácilmente 3 ó 4 goles (y eso solo en los momentos en los que lo ví), no sé si saldrán con el mismo 11 pero la verdad, me parecieron defensivamente flojitos, flojitos.
La mente humana tiende a creer que los problemas pueden solucionarse con reuniones u otros conjuros institucionales, sin necesidad de cambiar el contexto que los genera (JOSÉ MANUEL NAREDO)
Ahora sabemos que nada bueno vendrá, si no lo traemos nosotros. (P.GUERRA)