Como alguien ha señalado ya, sensación agridulce la que me deja el partido. Antes de jugarlo, cualquiera firmaría el resultado final; una vez jugado, no.
Los primeros 20 minutos han sido de infarto. Posesión de balón para el Aleti y defensa bastante adelantada. Con lo que tenemos, un riesgo enorme. Menos mal que los delanteros ches no han estado finos en el remate. Hasta bien entrado el partido, nuestros jugadores de banda se han desentendido de su trabajo defensivo (bueno, se ha desentedido Simao, porque Morenito de Barrameda no es que se desentienda, es que no lo entiende siquiera). Unid a ello la enorme imprecisión en el pase. Consecuencia: como el Valencia ha abierto mucho el campo, mucho balón perdido, con autopistas por las bandas para los contragolpes ches. Lo dicho, un milagro que no nos hayan asaetado en ese primer cuarto de partido.
La segunda parte, mucho mejor. El equipo se ha cerrado más, Simao ha trabajado bien en defensa (lo que ha pagado en ataque, lógicamente) y Forlán ha cerrado mejor a un Baraja que, además, ya estaba boqueando. En consecuencia, la dinámica se ha invertido: ellos a dominar y nosotros al contragolpe, lo que nos benefició a nosotros tanto como les perjudicó a ellos.
Una pena que, puestos en éstas, nos hayan empatado. El 1-1, para mi gusto, si bien es difícil de parar, creo que De Gea se ha dormido, no sé si por no ver el tiro o por qué, pero ha reaccionado tardísimo. Y el 2-2, culpa casi entera de Salvio, que, una vez el lateral se va hacia el córner con Perea, se desentiende por completo del otro futbolista valenciano que está en la jugada, Vicente, y le permite entrar solito en el área para dar el pase de la muerte casi. Como a otros, no me gusta un pelo lo que voy viendo del chaval, cuya llegada en invierno cada vez entiendo menos. Habrá que darle tiempo, de maduración y adaptación, pero hoy por hoy creo que cualquiera de los extremos del filial cumpliría mejor que él.
Del arbitraje, pues más de lo mismo: los árbitros europeos, y más lo de esta competición, son peores aún que los españoles.El penalty que le han hecho al Kun en la primera parte, delante de sus narices, me ha parecido muy claro; la distribución de tarjetas, casera, casera; y las dos jugadas de Agüero al final (la tarjeta y expulsión de Bruno, y no conceder aquella ley de la ventaja), para arrastrarlo por los pelos hasta el aeropuerto. Por cierto, ¿qué coño pintan los "jueces de área? ¡Vaya invento bochornoso! Con lo fácil que era poner un juez de grada con su monitor de TV.
En definitiva, hemos tomado ventaja, pero está la cosa aún en el aire. El Valencia es muy peligroso arriba, aunque atrás es todavía peor que nosotros, con tantas bajas como tiene en su defensa, y en el centro del campo (sin Albelda ni Banega), por el estilo o peor. Y tienen una bala en la recámara para una emergencia, que nos puede hacer mucho daño: el gigantón serbio, al que no quiero ni imaginarme en el Calderón con la eliminatoria pendiendo de un gol en el tramo final del partido, teniendo en cuenta cómo vamos por alto y que Pablo está condenado al más completo ostracismo.