De fútbol ni hablar La gente respondió, pero el equipo no dio buenas señales Iban 91 minutos de juego cuando Gastón Pereiro le entregó una pelota en las manos -no puede considerarse como remate, por la debilidad con la que fue ejecutado- al belga Thibaut Cortois. Edward Piñón Nacional perdía 2-0 y el...