Mi "problema" es que yo no veía opciones de ganar la Liga hasta hace 4 días (casi literalmente), y sinceramente pensaba que podíamos pinchar en Bilbao, en Mestalla o incluso en Getafe antes que contra el Levante. Pero claro, llega el domingo a las 5 y piensas que ganando al Levante y al Málaga y con la inercia que llevaba el equipo, ganas la Liga sin tener que jugarte nada en Bacelona; y lo ves más que factible; pero tras lo del domingo y lo de ayer te ves que, en buena lógica (que es mucho decir viendo la no lógica de los últimos resultados), te tienes que jugar la Liga en el campo del mejor equipo de la última década. Y no es cuestión de no confiar a muerte en tu equipo, en tu entrenador, en tus posibilidades. Es, como dice Pereira, la realidad. Y está claro que esta temporada hemos ganado algo casi tan (o más, según se quiera mirar) importante que un título, como es el orgullo, el honrar la historia del Atleti. Pero no creo que quite para pensar que si no ganamos la Liga, se nos quedará un poco/bastante cara de gilipollas, y que el disgusto será importante.
Y claro que angustia y miedo y vergüenza era cuando nos jugamos el no descender hace 20 años o soportar las tantas temporadas mediocres, por no decir calamitosas, que nos hemos estado tragando en nuestra historia reciente. Pero que llegado este punto, queremos ganar y el domingo a las 5, no dependías de nadie, y ahora sí.