Bacharach: Veo que hay mucha gente que se alegra de lo de ayer, enhorabuena a los afortunados. También me sorprende que haya gente capaz de defender el mismo discurso llorón (buaaa, que todos están contra nosotros, buaaa, que en el as y en el marca dicen no sé qué) ante una selección comandada por Juanito y Santillana que ante otra comandada por Xavi e Iniesta.
A mí lo de ayer me da pena, porque pena me da que este equipo, el mejor equipo de selección que haya existido jamás, ideado por un personaje inolvidable y capitaneado por futbolistas irrepetibles, vaya a acabar así, vapuleado físicamente y sin ánimo ya para enfrentarse a las adversidades. No es el final que merecían. Porque lo de ayer a mí me parece que no tiene remedio. El baño táctico, los fallos individuales, todo eso puede llegar a ser solventable, pero la absoluta ausencia de una elemental preparación física, ante eso ya no se puede hacer nada. Ayer se juntaron tres futbolistas directamente lesionados, Piqué, Alba y Costa, tres jugadores que ya no van a ir a más, con dos jugadores como Xabi y Xavi, que siempre fueron incompatibles, cuyas virtudes siempre se anularon ante sí, pero que ahora además, enfrentados a sus últimos toques, multiplican cada uno los defectos del otro. Y para rematar, Ramos y Busquets en su peor momento del año.
Una pena.
Ya se sabe, la alegría va por barrios. Cuando unos celebran, otros se apenan.
Yo que no me he alegrado especialmente con la selección nada más que la Eurocopa de Luis. Ahora no he sacado el matasuegras pero el otro día me sacaron buenas sonrisas.
Cuando veía al topo medio llorón, sufriendo como un pvuta por rastrojo, junto al gramos y al otro payaso, y luego les recordaba dando cabriolas y volteretas a unos pocos metros de mí en la grada de Lisboa, deseándoles una triada, y que quieres que te diga, su tristeza me alegra, y mucho.
Los nuestros, pues lo siento por ellos, que se le va a hacer, pero yo soy más de ver sufrir a los "otros" que a los míos saltando por algo que ni me emociona, ni me interesa especialmente.
Sí, la fiesta va por barrios.
Por cierto, a mí Xavi e Iniesta, sin tenerles la manía que los otros, me la sudan igual.