Doggy: No le está dando nada de aire al equipo, señala, de diversas formas, por acción o por omisión, públicamente a unos cuantos futbolistas (Pablo, Juanito, Camacho, Raúl García, Mariano, Asenjo...) de una plantilla que no va, precisamente, sobrada de efectivos mientras se obceca no dosificando a Simao o a Forlán o manteniendo la insensata "apuesta" de Jurado, por no hablar de lo de Reyes, que ya veremos que pasa cuando tenga que ser suplente... Da la impresión de que, finalmente, QSF ha optado por no hacer equipo y por poner a "los mismos once cabrones"... Al final me he ido por las ramas...
Eso es muy relativo, Doggy, lo de que no está "haciendo equipo", tal y como lo planteas. Para mí sí lo está logrando, o al menos lo que entiendo como tal, esto es, haber alcanzado en mayor o menor medida un equilibrio en el campo, que es básicamente lo que necesitaba este Aleti con urgencia. De puertas adentro, la verdad, importa poco cuanto pase. Las circunstancias exigen ladear buenismos inocuos. De los que citas, tres son defensas, y se entiende que para Quique lo más relevante desde el principio ha sido apuntalar la defensa, a saber, buscar a cuatro jugadores que le aporten estabilidad al equipo, Independientemente de "catástrofes" puntuales, lo está consiguiendo. ¿Desde hace cuánto tiempo no se podía recitar los cuatro de atrás con la seguridad de que no ibas a fallar en alguno? Además el desgaste de un defensa ante la carga de partidos no es comparable para nada al de un medio o al de un punta. En todo caso serían los laterales los que más pudiesen padecer un hipotético cansancio, y vemos que en este caso tenemos solamente uno para suplir, Pernía, que, dada su trayectoria de esta temporada, puede decirse que ni existe para el entrenador. Quique ha encontrado a los cuatro potencialmente más benéficos en esta coyuntura, y entiendo que va a ir con ellos hasta el final.
Cansancio físico, y mental sobre todo, es el que puede padecerse del medio para arriba. Y ahí sólo son dos los jugadores a considerar, según tu apreciación y si obviamos a Jurado, Raúl García y Camacho. Dos hombres para una misma demarcación, porque es difícil que cualquiera de ellos pueda ser volcado a banda. Demarcación en la que Assunçao se sobra y se basta; demarcación a la que ofrece otro color Tiago, al tener capacidad -cada vez mayor, ya que parece ir encontrando el tono físico- de descolgarse de esta línea y llegar a posiciones más ofensivas aportando mucho de lo que carecía este equipo. Demarcación en la que, momentáneamente, sólo hace falta el aire del navarro cuando las circunstancias lo requieran y a la vista de que Quique no parece que vaya a optar por el 4-3-3 o cualquier variante que le lleve a jugar con un único delantero.
De Asenjo, sobran comentarios, él solo, con sus desafortunadas intervenciones, su boquita y la de su representante, se ha cavado su propia tumba. (Aunque, claro está, a tenor de las palabras de éstos, sus aptitudes no son dignas de un equipo como éste; él aspira a mayores logros.)
Poca maniobrabilidad tiene Quique para dar aire a los "once", mucho menos viendo el resultado que en este equipo comporta cualquier ligera modificación. (En todo caso, en la punta sí sería conveniente la dosificación de tiempos entre Agüero, Forlán e Ibrahima. Aunque presiento que Quique deposita en el africano una confianza mínima y marcada sobre todo por las circunstancias.) Sólo nos queda esperar a la pronta recuperación de Salvio, a que lo de Santander de la semana que viene sea un mero trámite, y entonces, a pesar de la Europa League, todo irá tomando la forma idónea para acabar la temporada en un puesto cómodo en mitad de tabla. Y, eso sí, para fijar la vista en la final de Copa. El objetivo, con todo lo horrible que está siendo este curso, estará más que cumplido si su rival acaba siendo el Sevilla y éste termina en puestos europeos en el torneo liguero.