Hay quien cree en alguna religión, en algún dios. a mi en momentos determinados de la vida tener a un atlético a mi lado me da confianza.
En vez de hablar del partido me voy a dar el permiso de contar algo personal de este fin de semana.
El Jueves acompañado de un familiar me acerque a la ventanilla de ingresos del hospital de la paz, tras entregar la cartilla de la S.S. me dieron habitación y pulsera de ingreso; ¡anda! un todo incluido con whiskies gratis y la piscina ya la busco yo le comente a la recepcionista entre risas.
Al llegar a planta, preguntas, tensiómetro, termómetro, indicaciones varias...terminado el proceso me tocaba a mí hacer la pregunta:
-¿Cuando salgo?
- Enfermera: Si todo va bien como pronto el Domingo.
- No puede ser, como muy tarde el sábado antes de las 2 que jugamos contra el Madrid.
La enfermera , a partir de ahora cervatilla, que me mira con cara sorprendida me contesta con sorna: -Descuida que no te se va a salir ningún apósito pues no vais a meter gol alguno.
-Tranquila que de los goles que os vayamos metiendo ya tendré cuidado.
A todo esto la otra enfermera que apoyaba la victoria atletica llamaba por telefono a una doctora para exponerle mi problema de horarios.
Ya en el quirofano al día siguiente:
Enfermera, ¿va para mucho la operación?
Tú tranquilo, te ha tocado el mejor cirujano.
Despues de un rato viendo pasar enfermeras de rojo y anestesistas de blanco se me acerca una señora de verde de unos 55 años con una sonrisa de oreja a oreja y me dice:
Mañana a estos les vamos a golear y lo vas a poder ver.
Momentos más tarde los anestesistas me hacen la tipica pregunta de con que quieres soñar, cuando en realidad llevaba un par de minutos soñando tras las palabras de la cirujana vestida de verde.
Tras el operatorio el viernes por la tarde me reencontré con la enfermera atletica que me estuvo dando indicaciones y cuidados toda la tarde . El sabado vienon dos pipiolos vestidos de blanco para aquello del posible alta, al verme se hacian cruces, en susurros se decian: no tiene ni apositos. Despues de parecer no haber `pasado por intervención quirurgica alguna el sabado a las 12,30 salí del hospital caminando con paso ligero acordandome de aquellos dos angeles atleticos que dejaba atrás.
A mí me hace ilusión ganar la EL, lo que no me hace ilusión es jugarla.