Aquellos canteranos del Atleti (Rubio, Julio Prieto, Minguez, Marina, Quique Ramos...) nunca alcanzaron el nivel de figuras del balompié, aunque alguno tuviese casi toda la madera necesaria (Ramos), y no por culpa de la prensa blanca sino debido a sus limitaciones físicas o técnicas. No pasa nada, tampoco son figuras del balompié Raúl Bravo, Capdevila o Antonio López y han sido internacionales. Kubala llegó a seleccionar a Manolote (Coruña), Hita (Sevilla) y Guzmán (Rayo Vallecano), que eran bastante tochos. Habéis citado a Benito que, en efecto, era mediocre y bastante canalla. Pero no tenéis derecho a insinuar que Gordillo era el titular de la selección (a costa de Quique Ramos) a causa del favoritismo del que han gozado tradicionalmente los jugadores del Madrid. Gordillo y Hugo Sánchez fueron los dos únicos jugadores de talla mundial que militaron en el Madrid de la Quinta del Buitre. (No, Schuster ya no era el gran Schuster, sino un jubilado del Barcelona, que después nos vino muy bien a nosotros).
En cuanto a las presuntas excelencias del tándem Ruiz-Arteche, tampoco me cuesta contradeciros. En mi opinión, todos los centrales del Atleti desde que tengo uso de razón (con la excepción de Balbino) estuvieron por encima del ínclito Ruiz (ni técnico, ni rápido, ni listo), uno de los mayores autogoleadores de la historia del club. La pareja Ruiz-Arteche es, por ejemplo, inferior kilo a kilo a la pareja Pablo-Perea de nuestros pecados.