En una entrevista a Antic, el año después del Doblete, y preguntándole sobre la psicología que había sabido aplicar sobre un grupo, que venía de pasarlo mal durante un par de temporadas, vino a decir que personalizaba en cada jugador. Que por ejemplo no podía tratar de igual manera a López, creo recordar, que a Solozábal, que era un tipo culto, con preparación e inquitudes.
Dicho esto, puede parecer trivial, pero yo le doy bastante importancia a que un líder en el vestuario tenga dos dedos de frente, y no sólo un par de cojones.
Fue un gran central, y un gran atlético... que como a otros muchos, no se les ha dedicado el cariño que se ganaron.
Un saludo.